CASTELLÓ. El Castellón ha completado la primera vuelta de Liga en una meritoria segunda posición, lo que le permite afrontar los 19 partidos restantes como firme candidato a disputar la fase de ascenso a Segunda División B. Pese a la derrota del pasado sábado en el Camp d'Esports de Lleida, los albinegros han firmado unos registros sobresalientes en cuatro meses de competición, con un balance de nueve victorias, siete empates y tres derrotas, para un total de 34 puntos.
Pero al margen de los números, los de Óscar Cano han dejado un sello de equipo con identidad y personalidad, con un óptimo funcionamiento colectivo y buenos recursos individuales. Lo han hecho con una plantilla sin cambios muy drásticos respecto al pasado curso, pero sabiendo optimizar mejor los recursos que llegaron entonces y complementarlos con los refuerzos estivales, que han elevado el nivel del equipo.
El proceso emprendido de la mano de Cano ha situado al Castellón en segunda posición de la Liga y a un solo punto del líder, cuando ya se ha alcanzado el cincuenta por ciento de la competición. Este balance le sitúa en buena disposición para luchar por una plaza de play off, si bien la pugna será exigente ante la gran cantidad de pretendientes que hay para ocupar esas posiciones. Los orelluts apenas aventajan en cinco puntos al quinto clasificado, en el grupo más equilibrado de los cuatro que forman la categoría de bronce del fútbol español.
El domingo arrancan la segunda vuelta ante el Sabadell, primero en la tabla clasificatoria y al que desbancarán en caso de ganar.