CASTELLÓ. La plantilla del Castellón regresa al trabajo en la tarde de este lunes después de haber gozado de una semana de vacaciones a causa del parón competitivo de fin de año.
Los albinegros retoman los entrenamientos con una sesión vespertina en Castalia que servirá para iniciar un proceso de preparación equivalente a una pretemporada, con dos semanas de trabajo antes de afrontar el siguiente compromiso liguero, ante el Alcoyano.
Los jugadores orelluts trabajarán hasta este viernes antes de disfrutar de dos días de descanso el sábado y domingo. Serán las únicas jornadas de reposo, pues la semana que viene trabajarán a diario con la mente puesta en el Alcoyano, rival al que visitarán el sábado, 8 de enero.
Esta preparación se producirá después de un mes de diciembre atípico en el que el Castellón regresó de un parón obligado por el coronavirus para disputar siete partidos en tres semanas. Los efectos de tanta carga competitiva se notaron en el tramo final de esta secuencia, especialmente en el choque frente al Sabadell, que los de Escobar perdieron tras un pobre desempeño.
Enero también será un mes intenso en el calendario de los albinegros, que disputan cinco partidos en un corto espacio de tiempo: el ya citado en Alcoy y los choques frente a Villarreal B (18), Linares (23), Sanluqueño (26) y UCAM Murcia (30).
El choque frente al filial amarillo corresponde a la jornada que se aplazó en su día debido al brote de covid-19 que sufrió la plantilla del Castellón en noviembre y que se tiene que jugar antes de que finalice la primera vuelta. Así pues, el calendario volverá a intensificarse para los orelluts, que jugarán dos jornadas intersemanales consecutivas.