CASTELLÓ. Noviembre complicado para el comercio de la capital de la Plana. Los comercios tradicionales del centro de Castelló han detectado como en las últimas semanas se ha producido un frenazo en las ventas a causa del efecto Black Friday.
Esta tradición norteamericana que da el pistoletazo de salida a la campaña de rebajas tras Acción de Gracias ha arriagado con mucha fuerza en España, "y el comercio tradicional nos hemos tenido que adaptar para ser competitivos", explica la presidenta del Castelló Espai Comercial, Charo Broncal.
Sin embargo, "el cliente es conocedor de que el viernes 26 de noviembre habrá grandes descuentos por lo que ha decidido frenar el consumo estas semanas". Todo ello se suma a que no ha habido un descenso pronunciado de las temperaturas, lo que precipita la venta de ropa de abrigo y menaje del hogar, y a "las noticias de subidas de gastos como la electricidad" que retraen el hábito de consumir.
Para el conocido como Viernes Negro, la plataforma que aglutina a más de 70 comercios del centro de Castellón avisan de que habrá descuentos de hasta el 40% por lo que "si noviembre se vende poco y lo que se vende es con descuentos, los márgenes de beneficios son muy escasos".
Broncal considera, no obstante que "el tejido comercial del centro está preparado para ofrecer los mejores servicios" y tanto de cara a esta jornada de ventas (en que se suele duplicar la facturación) como en Navidades habrá campañas coordinadas con el Ayuntamiento de Castelló para animar a las ventas.
"El comercio del centro disponemos de la mejor oferta, del trato más cercano y precios competitivos para fidelizar al cliente", ha advertido la presidenta de esta plataforma.
"Somos conscientes de que la competencia es feroz, de que el cliente tiene otras plataformas digitales, pero nuestro sello de calidad y atención es nuestro gran distintivo", explica, y recuerda que hay facilidades para aparcar en los parkings de Castelló por comprar en estos establecimientos y un gran tejido de productos de calidad.