MORELLA. El Ayuntamiento de Morella y la Generalitat Valenciana han luchado por garantizar el agua a los ganaderos durante los meses de verano. El consistorio morellano lo ha hecho en diferentes actuaciones en las canalizaciones que conducen el agua a la balsa de la Fábrica Giner, bombeo de agua, y adecuación de nuevos puntos de emergencia. Mientras, la Conselleria ha hecho llegar a través de cisternas agua desde la costa hacia las balsas comunes de toda la comarca dels Ports.
Este traslado de agua necesario durante este verano se ha podido adaptar con la mejor captación y las lluvias que han hecho que sea la balsa de la Fábrica Giner el principal punto de recarga y desde donde la conselleria actualmente reparte agua al resto de balsas comunes de toda la comarca.
Este punto se convirtió, ya en plena primavera, en prácticamente el único lugar de recogida de agua para las cisternas de los ganaderos después de que las balsas particulares y comunes de diferentes puntos se secaran así como lo hizo también la balsa de la Torre Segura. Por tanto, todos los ganaderos del término municipal de Morella se derivaron a la Fábrica Giner que continuaba recibiendo agua del río.
Sin embargo, esta agua ha ido disminuyendo su caudal con varios momentos de gran preocupación después de que la balsa bajara más del 60% de su capacidad en pleno julio lo que dificultaba la extracción de agua, pero especialmente la cantidad disponible por abastecer a las explotaciones que la utilizaban. Algún día del mes de agosto se llegó a recoger más de 500.000 litros en un solo día siendo incapaz el agua de entrada de suplir a la salida. En estos momentos desde el consistorio se pusieron en marcha los antiguos pozos del complejo industrial de los que se bombeaba agua hacia la balsa para aumentar el caudal de entrada.
La concejala de Desarrollo Rural, Ana Belén Soro, ha explicado que "desde este momento se reunió a todos los ganaderos afectados para seguir un orden de recogida y concienciarnos todos de la necesidad de conservar y aprovechar el agua en máximo, de no llenar las balsas particulares y utilizar la necesaria para que todos tuviéramos suficiente". Al mismo tiempo, un grupo de éstos se encargaron de limpiar una parte de la acequia que da acceso a la antigua balsa del complejo. "Después, el consistorio realizó unas obras en la conexión entre la balsa histórica, donde estaban los patos antiguamente, y la balsa de recogida de agua por camiones. Se logró aumentar el caudal de agua de forma considerable y que subiera su nivel hasta ahora que vuelve a estar al máximo gracias a estas medidas ya las pocas lluvias que van llegando", ha concretado la concejala.
Además, y para reforzar el servicio que daba ésta, desde el consistorio también se reparó una balsa de obra de la zona de la Torreta. En este punto se pusieron en marcha unos pozos de esta finca para tener así un nuevo punto de recarga. Allí se derivó parte de los camiones y tractores de recogida para dar descanso a la otra balsa mientras se recuperaba y también para los vecinos de la zona que les es más fácil y cercano a este punto. Por otro lado, también se ha vuelto a pedir la concesión de la poza de la torre Segura, que tras muchos obstáculos han autorizado a poder agarrar agua de allí. Así es como se hacía antes de hacer la balsa grande de 3,3 millones de litros.
Actualmente, la situación ha mejorado con las lluvias recibidas en las últimas semanas, sin embargo, también se ha actuado en la captación de la balsa de la Torre Segura, que ya se encuentra al 100% de su capacidad de nuevo, y la conselleria sigue repartiendo agua en los puntos donde la situación aún no ha mejorado lo suficiente. Para los próximos meses se preparan nuevas actuaciones en estas captaciones las balsas municipales y se está trabajando en la creación de nuevas balsas de mayor capacidad para aguantar mayores períodos de sequía.