CASTELLÓ. El sueño del TAU Castelló de seguir vivo en la lucha por el ascenso a la ACB se truncó tras perder por 70-78 en el tercer y definitivo partido del play off ante el HLA Alicante. Fue una decepción para los numerosos e ilusionados seguidores del cuadro castellonense que se dieron cita en el Ciutat de Castelló, pero el equipo no rayó a su mejor nivel, sobre todo en una primera parte para olvidar.
Los hombres de Toni Ten estuvieron muy cerca de culminar una milagrosa remontada en un partido que estaba perdido al descanso. De haberse producido, hubiera sido la victoria más impresionante que se recuerda en el Ciutat de Castelló, pero no llegó por detalles en el tramo final del choque y los errores acumulados al principio.
El duelo empezó con los locales fallando varios triples a pesar de haber hecho una buena selección ante la dura defensa que empleaba el cuadro de Pedro Rivero. Pasaban los minutos y los de La Plana seguían sin anotar, por lo que en el minuto 5 el luminoso reflejaba un preocupante parcial de 0-8. El HLA Alicante, ante la baja de su experimentado base Llompart, optó por el canterano Guillem Arcos, quien respondió con creces en este tramo inicial con 5 puntos en su cuenta y un buen trabajo defensivo sobre Edu Durán. Nadie en la parroquia local daba crédito a lo que estaba ocurriendo: no había forma de que entrara un lanzamiento; se fallaban hasta tiros claros y de este modo el combinado visitante seguía aumentando su renta (0-14, min. 8).
Por suerte, apareció la figura de Kai Edwards, quien con 5 oportunos puntos consecutivos acabó con la sequía castellonense. También fue muy bien recibido el posterior triple de Joel Sabaté para demostrar que desde lejos el TAU Castelló también podía encestar. A partir de ahí, varios jugadores más se quitaron los nervios y fueron metiendo sus tiros, con lo que el susto inicial quedó parcialmente olvidado al término del primer cuarto (11-18).
Espoleados por su afición, los jugadores locales apretaron todavía más las clavijas en defensa, pero estaban lastrados por el bajo acierto en los triples y algo desconcertados con el criterio arbitral. La cosa seguía pintando mal (16-26, min. 14), por lo que Toni Ten buscó darle otro aire al partido con dos bases en pista y un tiempo muerto. Si la situación tenía mala pinta, todavía fue a peor con lo que sucedió a 3:55 del descanso. Un encontronazo entre un desquiciado Edu Durán y su defensor acabó en una tangana en la que varias personas tuvieron que intervenir para poner paz. Tras una tensa deliberación de los colegiados, decretaron varias faltas técnicas y la falta descalificante para Edu Durán. La verdad es que era merecida, ya que el talentoso jugador local perdió la cabeza y quiso liarse a puñetazos con un rival.
Fue un palo muy duro quedarse sin el gran anotador madrileño; y tras los lanzamientos de los tiros libres de las técnicas y un triple de Pitts se puso el partido muy cuesta arriba (16-37, min. 18). Además, los tiros continuaban sin entrar. El porcentaje era malo hasta en los tiros libres. Al descanso se llegó con 22-40 en el marcador y la serie del TAU era de 5/20 en tiros de dos, 2/16 en triples y 6/11 en tiros libres. Solo quedaba esperar un milagro.
En la reanudación, el TAU salió con el cuchillo entre los dientes y el numeroso público aumentó los decibelios. Ahora los ataques eran rápidos y directos por parte del cuadro local, que vio algo de luz con el despertar anotador de Juanjo García (29-40, min. 23). Sin embargo, apareció la clase de Urtasun y Gjuroski para volver a abrir hueco (29-47, min. 25). A partir de ahí, el choque empezó a ser más trabado, con numerosas faltas e intercambios de tiros libres, con lo que la diferencia no se reducía.
Entonces llegó un nuevo triple de Gjuroski, por lo que las opciones de darle la vuelta al choque eran muy remotas (36-55, min. 27).
A partir de ahí, se vivieron unos minutos muy buenos del combinado anfitrión. Fue incisivo hacia el aro y su rival cometía numerosas faltas e iba sumando desde la línea de 4,60. Además, la alternancia de defensas descolocó a los alicantinos, que por primera vez en mucho tiempo vieron su ventaja por debajo de los 10 puntos (50-59, al final del tercer cuarto). Así las cosas, la remontada era posible, ya no parecía tan descabellada.
El pabellón se incendió todavía más con el arranque del último cuarto, ya que un parcial de 4-0 en 50 segundos hacía real el sueño (54-59). La defensa local era agresiva e intensa, prácticamente perfecta, y el HLA Alicante era el que no metía nada y no tenía confianza. Alvarado anotaba y dirigía con maestría y tanto Stainbrook como Adala Moto ya eran más reconocibles. Los interiores visitantes estaban muy bien sujetos, su perímetro estaba fallón en los triples y Urtasun no encestaba en sus penetraciones finalizadas en bombita. Así las cosas, estalló la locura con un triple de Sabaté que significó lo que parecía imposible: empatar el partido a 59 en el minuto 34.
Con los nervios en la grada y en la pista a más no poder, el partido entró en una fase de intercambio de canastas, con lo que la igualdad se mantenía. Sin embargo, unos fallos puntuales del TAU, dos tiros libres anotados por Urtasun y una canasta de Galán volvieron a complicar el triunfo a 1:45 del final (66-70). Stainbrook falló un triple y Allen heló el Ciutat con una canasta muy dañina que secundó Gjuroski con otro triple que esta vez hizo desvanecer el sueño castellonense. Se estuvo cerca de una victoria histórica, pero acabó en el tópico de remar y remar para ahogarse en la orilla. Una orilla muy lejana a la que ha llegado el conjunto de Toni Ten en una brillante temporada.