CASTELLÓ. La comunión entre la afición del Castellón y los jugadores vivirá su capítulo más importante este domingo con ocasión del partido que los albinegros disputarán frente al Alcorcón desde las 19:00 horas de este domingo y que abrirá la final por el ascenso.
La magia de la grada, tan acostumbrada a lo largo del curso, alcanzó una altura extraordinaria hace una semana frente al Deportivo en un encuentro en el que el público tuvo mucho que ver en la clasificación de los orelluts para la ronda final. Siete días después, el equipo de Albert Rudé espera sentir algo similar en un partido que no decidirá el ascenso, pero que puede marcar el camino.
La hinchada albinegra agotó todas las localidades disponibles para este compromiso con tres días de antelación, por lo que la atmósfera de partido grande se vivirá desde mucho antes del pitido inicial.
El club ha invitado a la afición a que acuda con antelación a Castalia para estar con el equipo desde su llegada al estadio municipal. Así, los seguidores del club de la Plana podrán animar a futbolistas y cuerpo técnico a la entrada del autobús del equipo.
También se ha pedido a la hinchada que esté en las gradas desde las 18:15 horas para mostrar su aliento a los jugadores en el calentamiento.
Antes, los seguidores orelluts habrán podido ver el último entrenamiento previo a este compromiso, programado para las 10:30 horas de este sábado, en Castalia.
Con estos prolegómenos, el Castellón espera disponer de un terreno en condiciones para sacar la mejor cosecha en el primer asalto por el ascenso. Porque, como se comprobó ante el Deportivo, el público también es diferencial para el conjunto albinegro.