VALÈNCIA. Tras el devastador paso de la Dana por la provincia de Valencia, han surgido múltiples iniciativas para apoyar tanto a las familias como a los negocios afectados. Desde campañas de donaciones hasta brigadas vecinales que han colaborado en las tareas de limpieza, el espíritu altruista ha supuesto un importante motor de esperanza para las comunidades afectadas por el temporal. Entre estas acciones solidarias, destaca un proyecto que utiliza la tecnología como puente para impulsar la recuperación económica de los comercios locales: un mapa interactivo que muestra los establecimientos reabiertos en las zonas de la Dana.
Esta herramienta colaborativa, diseñada por las voluntarias Susana Jarque y Cristina Medina, conecta a comerciantes y consumidores en un esfuerzo conjunto por reactivar la actividad económica en municipios del área metropolitana de Valencia como, por ejemplo, Massanassa o Paiporta. Con una interfaz sencilla pero efectiva, el proyecto emplea dos códigos QR: uno para que los propietarios registren sus negocios y otro que permite a cualquier persona acceder al mapa en tiempo real.
"En estos momentos, cualquier esfuerzo suma y queríamos aportar algo práctico que fuera más allá de las donaciones tradicionales", explica Medina a Valencia Plaza, quien se ha encargado de diseñar y gestionar el mapa. "Nuestro objetivo es visibilizar los comercios afectados que han logrado reabrir para que la gente sepa dónde puede apoyar con su consumo", añade Medina.
La base de esta iniciativa es un mapa interactivo en Google Maps, por lo que resulta accesible desde cualquier dispositivo mediante un código QR. Para los comerciantes, el proceso de registro es rápido y gratuito. A través de un formulario de Google, pueden proporcionar información básica sobre su negocio, como su ubicación, tipo de actividad, horario y detalles adicionales para los clientes. Medina se encarga de verificar cada inscripción y de añadirla manualmente al mapa, asegurándose de que los datos son precisos y actualizados.
¿El resultado? Un recurso sencillo y práctico para los consumidores. Además, el mapa incluye una leyenda que clasifica los negocios según su actividad: farmacias, restaurantes, fruterías, salones de belleza, entre otros. El diseño intuitivo permite localizar rápidamente los establecimientos reabiertos en los municipios afectados por la Dana, lo que facilita que los clientes puedan decidir dónde consumir para apoyar la economía local.
"Queríamos que la herramienta fuera accesible para todos, incluso para quienes no tienen mucha experiencia con la tecnología. Con solo escanear el QR, ya puedes ver en el mapa qué negocios están operativos y necesitan tu ayuda", comenta Medina a este diario. Hasta el momento, se han registrado 18 negocios, pero las creadoras de esta herramienta esperan que el número crezca a medida que más comerciantes y consumidores conozcan la iniciativa.
En ese sentido, el éxito de este proyecto no radica únicamente en la tecnología, sino también en la movilización comunitaria que lo respalda. La divulgación de los códigos QR, así como del mapa interactivo se ha realizado a través de redes sociales y aplicaciones de mensajería instantánea como Whatsapp, donde las listas de difusión han jugado un papel clave. Cristina y Susana han optado por un enfoque cercano y directo, compartiendo la herramienta en grupos de voluntarios y animando a las personas a difundir el mensaje.
"Es importante que todos pongamos nuestro granito de arena. Aunque no estemos directamente afectados por la Dana, podemos ayudar compartiendo esta información o eligiendo comprar en estos negocios cuando tengamos la oportunidad", señala Medina. Además, el proyecto busca concienciar sobre la importancia del comercio local. Cada compra en uno de los negocios reabiertos tras la Dana contribuye a que puedan seguir adelante, invertir en sus establecimientos y superar las dificultades económicas provocadas por el temporal.
El impacto del mapa no se limita solo al ámbito local. Su alcance digital permite que personas ajenas a las zonas afectadas, pero interesadas en colaborar, también puedan localizar estos negocios y contribuir, ya sea visitándolos o compartiendo la iniciativa. Este enfoque colaborativo refuerza la idea de que la recuperación económica tras desastres naturales no es solo una tarea gubernamental, sino una labor conjunta de todos los sectores de la sociedad.
“Nos parecía importante que no solo la gente de las zonas afectadas tuviera acceso a esta información. Muchas veces vamos a comprar sin fijarnos demasiado en dónde, y esta herramienta nos permite priorizar a los comercios que realmente necesitan nuestro apoyo”, concluye Medina.