modelo perteneciente a la compañía iTT cerámic

El mármol Portobello, protagonista en un reciente proyecto de Zinarea Interior Design en Taiwán

8/04/2019 - 

CASTELLÓ. Minimalismo, luminosidad y funcionalidad definen el proyecto de interiorismo desarrollado por Zinarea Interior Design en un apartamento privado de Taichung, en Taiwán, donde el modelo Portobello de ITT Ceramic tiene un protagonismo destacado, ya que ha sido aplicado como pavimento y como revestimiento en diferentes espacios de esta sencilla y coqueta vivienda familiar, según han informado este lunes fuentes de la propia compañía a través de un comunicado. Concretamente, Portobello se ha colocado en formato 60x120 en el suelo del salón principal, mientras que en formato 120x120 se ha instalado en la pared de la zona de televisión.

Los diseñadores responsables de este proyecto, Ku Chen Hung y Pan Yi Xuan, han elegido este porcelánico con acabado pulido y rectificado por representar toda la esencia y el clasicismo del mármol y por ofrecer una estética realista al máximo, incorporando todas las ventajas de la cerámica, como son su resistencia, versatilidad y fácil mantenimiento. Todo ello permite disfrutar de este producto de forma atemporal, porque, además, su elegante aspecto no pasa nunca de moda y es perfecto para espacios en los que se busca un acabado moderno y actual.

El mármol Portobello se inspira en el pasado para aportar versatilidad en el recubrimiento de todo tipo de superficies con un brillo espectacular que destila exclusividad, tal y como puede apreciarse en el resultado del trabajo realizado por los profesionales de Zinarea Interior Design, donde predominan el blanco y la luz como elementos claves del diseño de interiores a la hora de delimitar áreas funcionales con calidez y lograr una mayor sensación de amplitud.

El modelo Portobello es un recubrimiento perfecto para una vivienda de estas características, en la que el aprovechamiento del espacio era un requisito fundamental. Por ello, se ha optado por vestir los suelos y paredes con un tono claro, pero con marcada personalidad, combinando mobiliario en blanco y diferentes tonalidades de marrón y convirtiendo la cocina en una estancia para ser disfrutada en el día a día por toda la familia. Además, en esta planta del apartamento se ha optado por separar con una gran cristalera la cocina office de la zona de descanso y relax de modo que se proporciona al espacio mucha más claridad.


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