CASTELLÓ. La licitación para rehabilitar el Mercado de Abastos de Castelló entra en la recta final. Los funcionarios municipales ultiman la valoración de las cuatro ofertas presentadas para que la Mesa de Contratación eleve a la Junta de Gobierno Local una propuesta de adjudicación. Tras la baremación de las plicas con los criterios técnicos, las empresas Civicons y Pavasal toman una ligera ventaja sobre Crisol, Obras y Servicios (Cos) y Gimecons, que son las otras dos postulantes.
Si no surge ningún imprevisto durante el proceso, la previsión que maneja el Acord de Fadrell pasa por resolver el concurso público antes de concluir el mes. Al menos, en lo que se refiere al dictamen respecto a la concesionaria de la obra civil. Los técnicos disponen de la documentación relativa a los aspectos económicos de las concurrentes desde el pasado 3 de marzo, cuando la citada Mesa de Contratación abrió los sobres para remitir el contenido con vistas a su estudio y valoración, con la emisión del correspondiente informe.
Las cuatro mercantiles plantean, como cuestiones más relevantes, rebajas sobre el presupuesto del contrato (IVA excluido) y ampliaciones del plazo de garantía. En relación al primer asunto, las reducciones van desde el 1%, como más baja, hasta el 10,49%, como más elevada. En este último caso, y aplicado al importe del proyecto (1.876.832,12 de euros), supone una disminución de casi 200.000 euros (en concreto, de 196.879,68 euros).
A pesar de que la baja económica tiene un peso sustancial en la evaluación final, lo que inclina la balanza en esta licitación es la fórmula presentada por las aspirantes para conciliar la actividad diaria con los trabajos de reforma. No es un asunto menor, ya que para los vendedores resulta esencial que no existan contingencias para desarrollar su profesión con normalidad. De ahí que se le haya dado una mayor importancia en las cláusulas susceptibles de estimación.
El Mercado de Abastos se construyó en 1982 y desde su inauguración no ha sufrido ninguna remodelación de calado. La falta de inversiones se constata al comprobar el material utilizado para la cubierta, de amianto, prohibido desde hace años en las edificaciones. El complejo dispone de dos inmuebles. El principal tiene una superficie construida de 6.966 metros cuadrados. Se trata de una estructura metálica a dos alturas y alberga los puestos de los comerciantes. El segundo edificio abarca una extensión de 1.038 m2 y está ocupado por una zona de supermercado de 523 m2 y otra de almacén abierto de 515 m2.
La reforma integral propuesta por el Ayuntamiento de Castelló consiste en cambiar la cubierta, renovar los aseos y la red de saneamiento, implantar una instalación fotovoltaica para autoconsumo (200 placas solares) y ampliar el muelle de carga y accesos. El presupuesto de la obra civil asciende a 2,2 millones de euros y cuenta con financiación europea a través de los fondos Feder. La ejecución tiene un plazo de seis meses a contar a partir de la firma del acta de replanteo.
Todas las concurrentes promueven el uso de las energías renovables y limpias en sus ofertas. Como mejoras más destacadas cabe mencionar la colocación de tubos de luz solar, aireadores en cubierta, aerotermia y rejillas de ventilación en las fachadas. También se plantea un monitorizado de las puertas de accesos e incremento de las zonas ajardinadas.