CASTELLÓ. El concejal del Grupo Municipal Popular, Juan Carlos Redondo, ha lamentado este domingo que el Ayuntamiento de Castelló “únicamente se acuerde de limpiar los barrancos a instancias de las quejas vecinales” y ha reclamado “medidas urgentes que permitan ampliar los cauces, con el fin de prevenir posibles inundaciones en caso de que se produzca un episodio de lluvias torrenciales”.
Redondo, que ha visitado la zona del cauce del Barranco del Sol a su paso por el casco urbano acompañado por el presidente de la Asociación de Vecinos San Agustín y San Marcos, Francisco Cabañero, ha indicado que, “a pesar de que el consistorio, a instancias de los vecinos, al fin ha trabajado en la zona a finales de esta semana para eliminar vegetación y suciedades, el problema de base continúa existiendo”. “Aunque el Barranco del Sol es, junto con la Marjaleria, el Río Seco o el Barranco de Fraga, entre otras, una de las zonas que la propia Generalitat Valenciana señala como de alto riesgo, en Castelló seguimos sin contar con un plan específico anti inundaciones que establezca de manera detallada las diferentes vías de actuación y protección de la ciudadanía en caso de emergencia”, ha apuntado Redondo.
El concejal del Grupo Municipal Popular ha alertado de la “falta de capacidad de desagüe de los cauces que rodean la ciudad, justo cuando la Agencia Estatal de Meteorología anuncia posibles episodios de lluvias de hasta 100 litros por metro cuadrado para la próxima semana en Castelló”, por lo que ha pedido al equipo de gobierno que “actúe de manera global y urgente para acondicionar las zonas del casco urbano que, por sus características, presentan un mayor riesgo, con el fin de prevenir posibles problemas en esta línea”.
Al respecto, ha apuntado al caso del cauce del río Seco, “donde el equipo de gobierno, además de anunciar en reiteradas ocasiones una ampliación de la desembocadura que sigue sin ejecutarse, continúa sin solucionar los problemas de proliferación de vegetación y basura que, durante los últimos cuatro años, se han ido acumulando hasta suponer un grave obstáculo que impide que el agua circule libremente, con el consiguiente riesgo de desbordamiento”.
“Pese a que lo hemos reclamado muchas veces e incluso propusimos la inclusión en los presupuestos municipales de partidas específicas para prevenir este tipo de incidentes en las zonas que presentan mayores problemáticas en caso de precipitaciones intensas, no es de recibo que, cada vez que se produce un episodio de lluvias torrenciales, se repitan de manera sistemática los mismos problemas y los mismos errores”, ha añadido Redondo, que ha reclamado al equipo de gobierno que “desarrolle de una vez la normativa que debe regular los procedimientos en caso de posibles inundaciones, ya que está en juego la seguridad de la ciudadanía”.