El presupuesto de Diputación destina 3 millones a planes de transición energética y Penyeta Roja

CASTELLÓ. La Diputación de Castellón ha consignado 3 millones de euros en los presupuestos de 2023 para la ejecución de tres grandes proyectos provinciales, sujetos a la concesión de subvenciones a través de fondos europeos, sobre transición energética, transformación digital y modernización de las administraciones públicas y rehabilitación del Centro Integrado de Penyeta Roja. Se trata de iniciativas que están en consonancia con la idea reiterada a lo largo de los últimos meses por el presidente, José Martí, de que los pequeños pueblos de interior no deben quedar al margen de los Next Generation EU.

La partida que se incluye en el documento de cuentas públicas para la primera fase del plan de transición energética asciende a 1.100.000 euros, un programa que se ejecutará en varias anualidades y cuyo realización supondrá una inversión global de más de 4 millones de euros.

Se trata de una iniciativa de implantación de sistemas de generación de energía renovable para cubrir gran parte de la demanda energética de los municipios de la provincia. Al respecto, conviene tener en cuenta que el incremento de los costes energéticos y el cambio climático no solo obligan al ahorro, sino también, a la producción de energía renovable y económica.

Para la implementación de este plan la Diputación de Castellón ya ha realizado 250 proyectos para los 69 municipios que se han adherido, aunque el objetivo es ampliarlo para que se pueda desarrollar en toda la provincia.

El proyecto incluye la incorporación de los sistemas a la plataforma SmartVillages de la Diputación y, en especial, a su vertical de sostenibilidad para la monitorización de la producción y el consumo de las instalaciones municipales y el cálculo de la huella de carbono.

Es una propuesta que se complementará con las funciones de contratación eléctrica sostenible para los ayuntamientos que asume actualmente la Diputación a través de la central de compras. La plataforma SmartVillages gestiona en la actualidad diversas instalaciones municipales en 28 pueblos de la provincia.

Transición digital

Las cuentas públicas de la Diputación de Castellón también incluyen una partida de 1.400.000 euros para el plan de transformación digital y modernización de las administraciones públicas con la intención de crear un territorio inteligente para la aplicación de nuevos avances tecnológicos y acabar con las carencias de conectividad en el interior de la provincia. Lo que se pretende es mejorar la productividad, automatización y telegestión de actividades y servicios en el ámbito rural a través de un plan director de telecomunicaciones, la acción SmartVillages Dipcas y un programa de dinamización.

En el plan director se incluirá el desarrollo de un mapa de carencias en materia de conectividad para posteriormente extender la banda ancha de muy alta velocidad en todo el territorio y adelantar la cobertura 5G en cada municipios.

La acción SmartVillages Dipcas está orientada al fomento de proyectos para la mejora del medio rural que tengan como principal objetivo proyectos, servicios y nuevas formas del uso de tecnologías en el campo de las ciudades inteligentes. El programa de dinamización incluye un conjunto de acciones de formación, promoción, difusión, vigilancia, propuestas de retos y hubs relacionados con la tecnología.

Los presupuestos de 2023 también consignan una partida de 472.000 euros para la rehabilitación integral del Centro Integrado de Penyeta Roja, que se espera ampliar con más fondos procedentes de la Unión Europea.