Fotos: Antonio Pradas
CASTELLÓ. El PSOE de Pedro Sánchez y Ximo Puig ha sido la fuerza más votada en la provincia de Castellón en las elecciones generales y autonómicas por primera vez desde hace treinta años. Recupera así la posición hegemónica desbancando a un PP que ha visto superados los peores pronósticos. Los socialistas de Castellón han conseguido 2 diputados en el Congreso, 3 senadores y 7 parlamentarios en Les Corts.
"España ha hablado, la Comunitat Valenciana ha hablado y Castellón ha hablado. Hemos pintado de rojo las urnas", proclamaba este domingo el secretario general del PSPV provincial y candidato autonómico, Ernest Blanch, en la sede socialista de la calle Carcagente, donde se han congregado decenas de dirigentes y militantes para celebrar la primera victoria con mayúsculas del partido desde 1989, en la época de Felipe González.
En los comicios generales, el PSOE ha obtenido 92.075 votos, lo que supone el 29,46 por ciento del total. Aumenta así 7 puntos porcentuales respecto a 2016 y se sitúa en cifras similares a las de 2011. Los socialistas pasan de 1 diputado a 2, y de 0 a 3 senadores, respecto a las pasadas elecciones. Consiguen escaño en el Congreso Susana Ros y Germán Renau, mientras Artemi Rallo, Ana Belén Edo y Pep Lluís Grau entrarán al Senado.
Y si histórica ha sido la victoria socialista, no menos trascendente ha sido la derrota popular. El PSOE se ha convertido en la fuerza mayoritaria en una provincia donde ni siquiera los casos de corrupción del fabrismo lograron destronar al PP en la últimas elecciones. La fragmentación del voto, con fuga de electores a Ciudadanos y a Vox, y la movilización de la izquierda, como dique de contención de la extrema derecha, han descabalgado a los populares de Castellón.
No en vano, los socialistas se han convertido en primera fuerza en los grandes municipios de la provincia en las elecciones generales de este domingo: Castelló, Benicarló, Burriana, l'Alcora, Onda, Vinaròs, Benicàssim, Vila-real y la Vall d'Uixó han apostado por Sánchez. "La ciudadanía quiere progreso y confía en aquellos que hemos llevado la honradez a las instituciones", ha sentenciado Blanch entre aplausos y vítores de los militantes.
La euforia impregnaba también el discurso de la cabeza de lista al Congreso, Susana Ros: "¡Hoy hemos hecho historia!". Acompañada por el resto de candidatos a las Cortes Generales y a las autonómicas, se ha comprometido a trabajar por "un futuro de libertad, progreso, derechos y valores". Ros, que es además un referente del sanchismo en la provincia, ha recordado que la capital de la Plana fue la primera parada del líder socialista en su carrera a las primarias y entonces ya le prometió que "Castellón no le defraudaría".
La victoria socialista en las generales se ha reflejado también en las autonómicas. El PSPV ha obtenido 7 escaños por la circunscripción de Castellón en Les Corts, lo que supone uno más que en 2015. Además de Ximo Puig, que encabezaba la lista, entran al parlamento autonómico María José Salvador, Ernest Blanch, Sabina Escrig, Carlos Laguna, Ana Besalduch y Francisco Gil. Con el 99 por ciento escrutado, los socialistas han obtenido 83.738 votos (el 27,12 por ciento del total), situándose así como primera fuerza por delante del PP, que pierde 3 escaños y se queda con 5. Le siguen Ciudadanos (4), Compromís (3), Vox (2) y Unides Podem (2).
Los resultados de las dos citas electorales amplían las expectativas de los socialistas de cara a las municipales. "Trabajaremos para que la victoria de hoy sea la victoria del 26 de mayo", señalaba el líder provincial del partido.
La misma idea circulaba por los corrillos entre destacados dirigentes en la sede de Carcagente: esperan que el efecto Sánchez les dé el impulso definitivo en las locales. De hecho, entre canapé y vistazo al móvil para consultar el último recuento, miraban con lupa los resultados mesa por mesa en la ciudad de Castelló, donde incluso en colegios electorales tradicionalmente del PP, como Carmelitas o Escolapios, los socialistas se han impuesto con clara ventaja.
"Hemos recuperado el orgullo de ser socialistas", comentaba un militante, mientras otros iban haciéndose hueco frente a la pantalla para ver a su presidente. Susana Ros, Carlos Laguna, Francisco Gil, Patricia Puerta o Mary Carmen Ribera no perdieron detalle del mensaje que el líder socialista transmitía desde Ferraz: "Hemos demostrado al mundo que se puede ganar a la reacción y a la involución".