CASTELLÓ. El grupo socialista del Ayuntamiento de Benicàssim ha denunciado el “enésimo tasazo” decretado por la alcaldesa, Susana Marqués, a los vecinos durante la actual legislatura. La última medida, que entrará en vigor a partir de abril de 2025, supone una subida mínima del 42% en el recibo del agua, una decisión que, según la portavoz del PSPV, Paloma Pascual, “es el resultado de años de mala gestión por parte del Partido Popular”.
Pascual ha señalado que, al no renovarse el contrato en su momento, en 2018, la empresa concesionaria ha continuado prestando el servicio "sin la obligación de realizar inversiones en infraestructuras". “Esto ha acelerado y agravado el deterioro de las instalaciones y tuberías que, seis años más tarde, precisan de una inversión urgente y significativa que saldrá de los bolsillos de los benicenses y no de la empresa”, ha explicado. “Si la alcaldesa hubiera sacado el contrato en su momento y obligado a la concesionaria a invertir, hoy no estaríamos en esta situación”, ha añadido.
La portavoz socialista también ha criticado que Marqués no haya optado por la oferta más favorable económicamente para el municipio. Según Pascual, el consistorio ha rechazado asumir el coste de dos nuevos depósitos de agua y el reemplazo de 200 kilómetros de tuberías deterioradas por las que se pierde el 23% del agua potabilizada. “Las inversiones las acabaremos pagando los y las benicenses con esta primera subida del 42% y que podría ser del 60% cuando se ejecuten todas las inversiones necesarias”.
“La alcaldesa mintió de forma descarada a sus vecinos cuando en campaña afirmaba que nunca subiría los impuestos. Hasta ahora ya hemos visto incrementos en el IBI, las tasas municipales y, ahora, el agua. Y pronto será la basura también”, ha asegurado Pascual. “Parece ser que Susana Marqués está decidida a meter la mano en los bolsillos de los benicenses y a convertir esta legislatura en la de los impuestos desbocados”.
