CASTELLÓ. "Francisco Cabañero, el concejal del PP en el Ayuntamiento de Castelló que opta a una plaza de funcionario en la misma área de la que es responsable político, se enfrentará a un tribunal de cuatro personas de las que tres son técnicos que están bajo sus órdenes en el consistorio". Patricia Puerta, portavoz del Grupo Municipal Socialista, señala que "estamos ante un nuevo escándalo del PP, en este caso de la mano de la alcaldesa, Begoña Carrasco, que fue la que colocó como concejal de Modernización y Transparencia a Cabañero".
El proceso selectivo, tal y como se informó desde el PSPV-PSOE, está abierto para dos plazas de especialista en informática, que están vacantes en la plantilla del ayuntamiento. El Boletín Oficial de la Provincia de Castelló (BOP), con fecha 9 de noviembre de 2024, publicó de forma definitiva la lista de aspirantes, un total de 18 personas, "entre las que figura el concejal del Partido Popular Francisco Cabañero".
En el citado BOP se expone además la designación de los integrantes del tribunal calificador del proceso selectivo. Se trata de cuatro personas, con sus respectivos suplentes, de las que tres de ellas "son técnicos que trabajan en el área que controla políticamente el señor Cabañero, una de ellas el presidente del tribunal", expone la portavoz socialista.
Puerta insiste en que "es inaceptable que el concejal de Modernización y Transparencia sea uno de los aspirantes a un puesto de trabajo de funcionario de la que él es el máximo responsable político, porque genera una indefensión absoluta al resto de aspirantes, y más viendo además la composición del tribunal calificador". La portavoz socialista deja claro que "Cabañero está en todo su derecho de aspirar a la plaza, pero si tuviese un mínimo de ética tendría que renunciar a ser concejal".
El problema, además, "lo generó la propia alcaldesa, Begoña Carrasco, cuando decidió nombrarlo concejal del área en la que ya sabía que Cabañero quería optar a una plaza de funcionario". La aprobación de la convocatoria y las bases específicas fueron aprobadas en abril de 2023, pero no sería hasta el 6 de junio de ese año cuando Cabañero solicitó participar en dicho procedimiento, "fecha en la que, tras las elecciones de mayo de 2023, ya se conocía la victoria en las urnas del Partido Popular y se anunciaba la alcaldía en manos de Begoña Carrasco. Cabañero, ese mismo 6 de junio, conocía, como integrante de la candidatura del PP, que iba a ser concejal del gobierno municipal, y asumió sin ningún miramiento la delegación de Modernización y Transparencia".
Sobre las declaraciones del portavoz del gobierno municipal, Vicent Sales, sobre este asunto, Puerta señala que "hace de nuevo de la mentira la base de su discurso, algo que ya no nos sorprende porque, como ya dijo públicamente en un pleno, 'mentir no es delito', y el PP se mueve como pez en el agua en este ámbito sin que le dé un mínimo de vergüenza".
"Cabañero trabaja en el ayuntamiento como interino, pero es ahora cuando se ha presentado a la plaza de funcionario para tener un puesto fijo". "El proceso de estabilización de decenas de plazas en el consistorio, efectivamente, se inició bajo el gobierno del PSPV, porque así vino marcado a nivel nacional, e insisto en que nadie pone en duda que Cabañero, como interino, quisiese presentarse a la plaza, pero lo que es inaceptable es que lo haga siendo el responsable político del área y que, encima, el tribunal calificador esté compuesto por técnicos municipales que están bajo su supervisión, cuando la Ley perfectamente permite elegir a expertos externos", agrega Puerta.
"Que Sales saque pecho diciendo que desde 2023 Cabañero se encuentra en servicios especiales de su plaza de interino para dedicarse a la concejalía es una perogrullada; solo faltaría que no lo hubiese hecho, porque está obligado a ello". "El portavoz de Begoña Carrasco, además, es el que menos puede hablar de 'colocódromos', porque todos sabemos los chiringuitos que acompañan al Partido Popular en los años en los que ha gobernado en las instituciones", concluye Puerta.