CASTELLÓ. El PSPV de Castelló critica que el pacto de gobierno de PP y Vox en el Ayuntamiento de Castelló “hace aguas nada más empezar, porque han pasado dos meses desde la investidura de la alcaldesa, Begoña Carrasco, y la ciudadanía ve con asombro que ya nos asomamos a la tercera remodelación del gobierno local tras el nombramiento de la edil popular Susana Fabregat como nueva delegada del Consell en Castelló”.
Así lo indica la portavoz del grupo municipal socialista, Patricia Puerta, quien asegura que Carrasco “se está riendo de toda la ciudadanía, porque es incapaz de poner en marcha el ayuntamiento ya que solo está preocupada por repartirse sueldos y sillones con sus amigos de la ultraderecha”. La representante socialista, en este sentido, lamenta que, “60 días después de que la alcaldesa cogiese la vara de mando, no haya querido activar las reuniones de trabajo de las comisiones informativas, clave para que la oposición pueda fiscalizar las actuaciones de PP y Vox”.
Las actuaciones de los partidos que forman parte del "pacto de la vergüenza hablan por sí mismas, pues han ocultado a la ciudadanía el acuerdo a la espera de las elecciones del pasado 23 de julio, han tenido la osadía de vender como propios proyectos que había puesto en marcha el gobierno de progreso del Acord del Fadrell y solo tenían una preocupación: asegurarse una buen nómina, negociar carguitos y arrinconar a la oposición”, añade Puerta.
Ahora, tras la salida primero de Salomé Pradas, el pacto con la ultraderecha después, y ahora con la próxima renuncia de Susana Fabregat como concejala del consistorio, “vamos tener que asistir de nuevo a otra remodelación del equipo de gobierno, las tercera desde junio, lo que deja el ayuntamiento en permanentes vacaciones y a una alcaldesa que está demostrando que el cargo le viene grande”.