CASTELLÓ. El puerto de Castellón agiliza el nuevo atraque de graneles líquidos, que espera tener concluido en agosto de este año. La dársena sur del recinto del Grau ha recibido recientemente los dos cajones de hormigón que servirán de base para el muelle (de 33 metros de eslora y 4.700 toneladas de peso). Con ello, hace aproximadamente dos semanas comenzaron las obras en sí mismas, después de que desde el 17 de octubre se hayan realizado las labores de geotecnia y todos los trabajos previos para preparar el asentamiento de los cajones.
De esta manera, arrancan ahora unas obras que fueron adjudicadas hace justo un año a Becsa y FCC por 3,7 millones de euros después de la renuncia de Rover, beneficiaria inicial del contrato. Todos estos problemas (y algún otro) han conllevado un retraso evidente en el proyecto, que ahora la Autoridad Portuaria compensará en parte con una agilización de las obras. De hecho, estas tenían un plazo de materialización previsto en los pliegos de 14 meses, que se verán sensiblemente recortados si se cumple la fecha de agosto para la puesta en servicio del nuevo atraque.
Antes, además de asentar los dos cajones, llegados desde Tarragona, Becsa y FCC tendrán que ubicar sobre ellos la superestructura que debe servir de superficie para el muelle y los dos duques de alba (como se conoce en el argot portuario a las estructuras pilotadas que se situarán a ambos lados del cuerpo central del muelle) que servirán para amarrar los buques.
El nuevo muelle permitirá atracar a buques de entre 5.000 y 45.000 TPM (tonelaje de peso muerto) y de esloras comprendidas entre los 110 y los 210 metros, que cargarán con materias primas y producto terminado de la refinería de BP, la planta de UBE y la de biodiésel de Masol, ubicada prácticamente enfrente de la infraestructura. En este sentido, el presidente de la Autoridad Portuaria de Castellón, Rafa Simó, destaca la importancia de la obra, porque permitirá "ganar competitividad" a estas empresas, que representan más de la mitad del tráfico global del puerto.
"Que un tipo de mercancías tan importante para este puerto como el granel líquido mejore su competitividad es muy importante", resalta Simó, quien destaca además el inicio de un proyecto que se estancó por momentos: "Seguimos avanzando en obras complejas y de envergadura".