El turismo arranca el verano a tope pero no llegará al nivel de 2019 y necesita alargarlo a septiembre

CASTELLÓ. El sector turístico castellonense ha arrancado el verano de la mejor forma posible, pero esto no quiere decir que los próximos meses vayan a significar la recuperación total de una rama económica fundamental en la provincia y que ha sufrido como pocas los rigores de la pandemia. 

Por partes: tal y como detallan a Castellón Plaza varios empresarios del sector, las reservas en el mes de junio han funcionado a las mil maravillas. Por ejemplo, el director general de Hoteles Intur, Iker Llano, reconoce que la respuesta "está siendo muy buena" porque "todos tenemos muchas ganas de viajar". Asimismo, en Marina d'Or están "gratamente sorprendidos" con el funcionamiento de los hoteles y apartamentos, señala su CEO, Francisco Pérez, hasta el punto que califica de "boom" la reapertura del pasado día 1. 

También en el Gran Hotel Peñíscola y en los apartamentos Alcossebre Sea Experience han arrancado "muy bien", con ocupaciones de hasta "el 100%" en momentos puntuales y teniendo en cuenta las restricciones derivadas de la situación, apunta su comercial Daniel Rambla. Junto a la Ciudad en el Mar, el responsable de los apartamentos Els Romers, Enrique Escuder, reconoce que junio "ha ido de bólido", con "llenos en fin de semana". Y Elena Beltrán, del departamento de Contratación y Promoción del Palasiet, en Benicàssim, afirma que, a raíz de la reapertura de las comunidades autónomas tras el confinamiento perimetral, el hotel registró "una avalancha de llamadas", hasta el punto de que "en muchas fechas de junio no tenemos plazas". 

Aún lejos de la normalidad

En esto tiene mucho que ver el hecho de que Castellón se nutre tradicionalmente del turista nacional, algo que ya aportó algo de oxígeno el verano pasado al sector. Pero, aunque todos ellos coinciden en que este verano será mucho mejor que el pasado, para muchos las cifras todavía estarán lejos de las de 2019. El propio Llano reconoce que la temporada será "mucho mejor que la anterior, pero no al nivel" de hace dos veranos. Así, la cifra estará en "un 50 o 60% de 2019, tanto en ocupación como en precio", con lo que de momento están "relativamente contentos".

También el consejero delegado de ZT Hoteles, Javier Gallego, apunta que, tras las últimas prospecciones realizadas, la demanda para julio está "aproximadamente un 30% por debajo de 2019", con lo que puede alcanzar "un 55 o 60% de ocupación, muy lejos del 80% que era lo habitual en julio en Castellón". A su vez, en agosto las reservas "van más lentas", aunque el también presidente del club de producto Introducing Castellón tiene "la esperanza de que pueda aumentar". 

Con estos condicionantes, para redondear un nuevo verano atípico el sector turístico castellonense pone la vista en el mes de septiembre. Si ese mes funciona bien, "tendremos alguna alternativa" para encontrar la rentabilidad, señala Gallego, "si no, sufriremos mucho". También el responsable de Intur Hoteles señala que el sector tendrá "un otoño muy largo".

Las caravanas están de dulce

De manera totalmente diferente están funcionando otras formas de viajar, que además han experimentado un impulso inusitado a raíz de la pandemia. Por ejemplo, el turismo de caravanas. Sobre ellas, el CEO de Aquíestoy Caravaning, Fabrizio Muzzati, señala que para este verano es imposible encontrar un vehículo de este tipo. Con ello, su trabajo también se centra actualmente en prolongar la temporada hasta el otoño.