Foto: ISABEL INFANTES/EPVALÈNCIA. Hace unos días, a las puertas de los días más intensos de la temporada navideña, el Instituto Nacional de Estadística (INE) confirmaba que los precios habían terminado noviembre con un incremento del 5,5 %, un registro inédito en veintinueve años y en el que destacaba, además de las subidas de la gasolina o la hostelería, el aumento en el coste de los alimentos. En el caso de la Comunitat, el encarecimiento de la alimentación se ubicaba en el 3,2 % con productos como la carne ovina, donde se halla clasificado el cordero, como uno de los más afectados.
Así, este alimento y otros como las frutas frescas se sitúan entre los más susceptibles a verse disparados por los tradicionales incrementos de precios durante los días previos a la Navidad. En este sentido, y aunque los datos del INE no se conocerán hasta enero, el observatorio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), elaborado con los precios de ciudades españolas como València, ya confirma a días para la Navidad que el kilo del cordero lechal se paga un 16 % más caro que hace un año y que el precio de la piña es un 21 % superior al de 2020.
El estudio de la OCU también incide en que los precios de las almejas y de las ostras están, respectivamente, un 30 % y un 22 % por encima del valor fijado durante las pasadas fiestas navideñas. Estos productos ya terminaron noviembre con un alza moderado en la Comunitat, del 2,4 % respecto al mismo mes del año anterior. Un dato que, no obstante, está muy por debajo del incremento en el coste del aceite, que con una subida del 23 % encajaba el mayor encarecimiento de los comestibles. Por su parte, la carne de ave (4,7 %) y el pescado (2,8 %) son otros productos que también padecieron subidas a las puertas de la campaña navideña.
En el lado opuesto, los azúcares experimentaron la mayor caída de precios según el INE y se encontraban en la Comunitat un 2,4 % por debajo de su valor en 2020, mientras que la carne porcina caía también un 0,7 %. En esta línea, los análisis que anticipa la Organización de Consumidores sostienen que, en Navidad, el precio de productos cárnicos del cerdo como el jamón ibérico estén entre los que menos crecen. Tampoco las bebidas alcohólicas, pese a su presencia habitual en las mesas durante las comidas y cenas de estas fiestas, llegan con incrementos relevantes en su coste.
Asimismo, y más allá de la gastronomía, existen bienes como las prendas de vestir que experimentan en diciembre precios más altos que en cualquier otro mes. Este enero, de hecho, el coste de la ropa de hombre y mujer cayó un 16 % respecto a diciembre de 2020, y es más que probable que este año suceda lo mismo. Por ahora, el último dato del INE indica que el textil femenino concluyó noviembre con un encarecimiento del 1,6 % sobre el mismo mes de 2020, mientras que el masculino costaba un 0,6 % más. No crecen de igual manera los precios en los complementos que solo son un 0,1 % más caros que el año pasado, pero sí la moda infantil y juvenil, cuyo valor es ahora un 1,4 % mayor.
Por otro lado, y aunque alimentos como la carne ovina o los aceites sí experimentan en toda España un encarecimiento muy destacado, existen contrastes en algunos productos en función de la región donde se adquieran. Así, según el Instituto Nacional de Estadística la Comunitat Valenciana es la autonomía con mayor aumento en el precio de las frutas frescas (9,6%) y la segunda donde más se ha incrementado el valor del pan en noviembre (4,5 %). También productos como los huevos muestran un crecimiento elevado sobre la media estatal.
El encarecimiento de alimentos como los lácteos, en cambio, es mucho más contenido que en comunidades como las Islas Baleares, mientras que la carne de ave, que acabó el mes de noviembre con un alza del 4,7 % en territorio valenciano, creció hasta un 6,7 % en Aragón. Por su parte, los precios de los moluscos y pescados solo han caído en una comunidad respecto a 2020, como es Castilla-La Mancha, mientras que la fruta fresca solo muestra una relajación de su coste en Murcia.
