CASTELLÓ. Los pisos turísticos no podrán estar inactivos durante más de un año. De lo contrario, la Conselleria de Turismo los dará de baja del registro autonómico de viviendas turísticas y, para volver a ejercer la actividad, deberán realizar de nuevo el proceso administrativo para su inscripción, tal como refleja la nueva normativa de pisos turísticos de la Comunitat Valenciana. Este jueves entra en vigor el nuevo decreto del Consell que regula los pisos turísticos.
El texto, que modifica la ley valenciana de Turismo y el decreto de alojamientos turísticos, se aprobó el pasado viernes y se publicó este miércoles en el Diari Oficial de la Generalitat (DOGV) y recoge todas las medidas anunciadas la pasada semana por la consellera del ramo, Nuria Montes: desde las nuevas exigencias de habitabilidad y calidad del servicio hasta el funcionamiento de las declaraciones responsables, que los titulares deberán actualizar cada cinco años, pasando por las normas de régimen interno que permitirá echar a los huéspedes si las incumplen.
Entre estas nuevas disposiciones, el decreto incluye algunos otros detalles. Por ejemplo, modifica el articulado referente a la modificación de la inscripción y la baja del registro. Y determina que el departamento de Turismo dará de baja las viviendas turísticas "cuando se constate por parte de la inspección de Turismo el cese de la actividad turística durante más de un año".
Este motivo de baja se suma, por ejemplo a otro que ya fijaba la normativa autonómica, según el cual el Consell elimina del registro los pisos turísticos "cuando no se haya iniciado la actividad o el servicio transcurridos dos meses desde la presentación de la declaración responsable que sea preceptiva".
Se trata de dos medidas que, según explican desde el departamento de Montes, buscan eliminar periódicamente del registro los pisos que no están activos para que no puedan operar sin un nuevo permiso y que también las estadísticas reflejen lo más fielmente posible el mercado de la vivienda turística en el territorio valenciano.
Otro de los nuevos motivos por los que se eliminará la inscripción de un piso turístico será si se detecta que se está alquilando "como vivienda o de temporada" durante el período que el titular dijo que lo arrendaría con carácter turístico. En ese sentido, cabe destacar que sólo se considerarán alquileres turísticos los arrendamientos de hasta 10 días, entre otros requisitos.
"El espíritu de la norma es aumentar los mecanismos de control sobre el sector", explican las mencionadas fuentes: "Si sacas la licencia, es para ejercerla y no para tenerla como un elemento de valor especulativo", aseguran en ese sentido. Por ello, y en aras de evitar la especulación con los permisos vigentes, recuerdan que la norma también obliga a presentar una nueva declaración responsable acreditando que se cumplen todos los requisitos legales cuando la vivienda cambia de manos.
Concretamente, el decreto aprobado por el Consell fija que "cuando se produzca un cambio en la propiedad de una vivienda de uso turístico registrada, [...] será de aplicación tanto a la vivienda como a la nueva persona propietaria, el régimen y requisitos legal y reglamentariamente vigentes, debiéndose presentar una nueva declaración responsable, con la aportación del informe municipal de compatibilidad urbanística para uso turístico favorable o documento equivalente".
Desde la Conselleria que dirige Montes se busca que a final de este año se actualice el registro sólo con las viviendas turísticas que están en funcionamiento. Por ello, el decreto determina que se darán de baja aquellos pisos turísticos que no comuniquen su referencia catastral antes del 31 de diciembre de 2024. "Entendemos que muchos de los pisos que hay en el registro están inactivos, por lo que las cifras no se corresponden con la realidad", aseguran las mencionadas fuentes sobre este aspecto.
A fecha de 2024 se encuentran apuntadas en el registro autonómico 105.111 viviendas turísticas en toda la Comunitat frente a las 73.841 pisos turísticos que existían legalmente en 2018. Un incremento de más de 30.000 viviendas turísticas en los últimos seis años que han engrosado el registro y que ahora el departamento de Turismo quiere actualizar. "Queremos 'limpiarlo' antes de que acabe el año", concluyen al respecto desde la Conselleria.
A partir del nuevo decreto, las viviendas turísticas deberán presentar una declaración responsable con numerosos requisitos, entre ellos las normas de régimen interno. En esta declaración deberá incluir el informe de compatibilidad urbanística, los títulos habilitantes, el número de referencia catastral, la cédula de habitabilidad, el certificado de la comunidad de propietarios, el seguro de responsabilidad civil y todo tipo de autorizaciones.
Además, los propietarios deberán certificar el cumplimiento de las obligaciones tributarias y de Seguridad Social, incluir el certificado energético, y en el caso de los locales terciarios reconvertidos a viviendas turísticas, que cumplen con las condiciones mínimas de habitabilidad y los códigos de edificación vigentes. A todo ello se sumará la exigencia de elementos adicionales de calidad del servicio, por los que quedan prohibidos los cajetines de llaves en la vía pública y será obligatorio un servicio de recepción e identificación, conexión a internet y línea de teléfono 24h.
Así pues, para poder seguir operando, las más de 30.000 viviendas inscritas desde 2018 deberán presentar esta declaración responsable antes de 2030. A partir de ahí, seguirán el régimen general para todas las viviendas turísticas, de manera que la validez del registro será de cinco años. Transcurrido este plazo, deberán renovar la autorización con una nueva declaración responsable.
Por su parte, los pisos turísticos inscritos en el registro autonómico antes de 2018 no tendrán que adaptarse a la nueva normativa. Una de las reclamaciones del sector es que la norma no fuera retroactiva, y la consellera admitió la semana que este punto había supuesto "un cierto encaje más o menos complicado" porque se ha tenido en cuenta "numerosa jurisprudencia". "La conclusión, y tras el informe de Abogacía, es que [...] en principio no se deben exigir retroactivamente nuevas exigencias para que ellas viviendas que ya tenían la licencia", aseguró la consellera.