VALÈNCIA (EP). El conseller de Sanidad, Marciano Gómez, ha anunciado que rebajará la puntuación que se otorga al conocimiento del valenciano en la baremación a partir de las próximas oposiciones que se convoquen: "Lo importante es tener a los mejores sanitarios".
Gómez, en una entrevista a Europa Press, ha explicado al respecto que "no puede ser, como hasta ahora, que el valenciano puntúe igual que un doctorado". En la última baremación aprobada por el Gobierno del Botànic el valenciano es un mérito que se igualaba a tener un doctorado. "Queremos a los mejores. Lo digo alto y claro. Queremos al mejor profesional sanitario para la mejor sanidad valenciana y cuando a uno lo tienen que operar, nadie pregunta", ha señalado.
Por ello, ha argumentado que son conscientes de que en la Comunitat Valenciana hay dos lenguas cooficiales, por lo que se incorporará el valenciano como mérito, "pero ubicándonos en su justa medida". De este modo, "lo que más puntuará será el conocimiento y la experiencia para tener al mejor médico". "Nos cuesta mucho trabajo que vengan médicos y lo que tenemos que hacer es poner facilidades sin ningún tipo de traba", ha recalcado.
Precisamente, ha apuntado que la falta de facultativos es uno de los tres grandes problemas de la sanidad valenciana, junto a la Atención Primaria y Salud Mental, y por ello ha recalcado: "Voy a elevar la voz de la Comunitat Valenciana en Madrid, quiero llevar el poder valenciano, porque es una responsabilidad clara del Ministerio y no puede estar de perfil".
Así, ha señalado que el Ministerio es "corresponsable de lo que sucede en la sanidad española y debe tener un papel coordinador" y, entre otras cuestiones, debe aumentar el número de plazas de formación para todos los profesionales.
Al respecto, ha apuntado que hasta que el Ministerio actualice las plazas de MIR a las necesidades -dado que un médico tarda unos diez años en estar formado- adoptará medidas "innovadoras" porque los mecanismos puestos en marcha por su antecesor, Miguel Mínguez, como el decreto de plazas de difícil cobertura o las alianzas estratégicas entre hospitales, se han demostrado insuficientes. Por ejemplo, ha expresado que en el Hospital de Vinaròs hay 44 plazas sin cubrir.
Por ello, pondrán en marcha un marco normativo específico para los Departamentos de Salud con problemas de difícil cobertura que incluya mejoras retributivas y curriculares para los profesionales, pero también organizativas que pueden llevar a la reordenación del mapa sanitario. Además, se está planteado "buscar medidas multidisciplinares de otros ámbitos". "Este plan ya lo tenemos en marcha y lo pondremos cuanto antes, pero sin precipitaciones", ha recalcado.
Gómez tampoco descarta medidas adicionales, entre ellas, la contratación, si fuera necesario, de médicos extranjeros con titulaciones homologables como ha hecho la Junta de Andalucía. "Evidentemente intentaré cumplir la normativa y que todas las contrataciones sean de especialistas con MIR, pero si no puedo hacerlo, tendremos que contratar a facultativos extracomunitarios para poder dar atención a los cinco millones de valencianos", ha justificado.
Asimismo, ha anunciado que van a revisar el "mal llamado" acuerdo de la jornada laboral de 35 horas alcanzado la pasada legislatura. En ese sentido, ha señalado que "lo que se acordó fue la reducción de 11 jornadas de forma paulatina hasta el año 2025" y "no una reducción de la jornada a 35 horas semanales de lunes a viernes con los objetivos de conciliación familiar y descansar 48 horas a la semana".
En ese sentido, ha advertido de que esta reducción de jornada lo que "genera un déficit clarísimo de personal cuando en estos momentos hay 750 plazas presupuestadas que no podemos cubrir y un déficit en la asistencia sanitaria en estos días". Por ello, van a reevaluar este acuerdo con el objetivo de que "en esta legislatura, de verdad, lleguemos a un acuerdo sobre las 35 horas semanales, de 8.00 a 15.00 horas, de lunes a viernes".