VALÈNCIA. La tragedia medioambiental acaecida la pasada semana en la Comunitat Valenciana a cuenta de los incendios de Bejís y La Vall d'Ebo, con casi 35.000 hectáreas arrasadas por el fuego, dejó también un episodio que, además de resultar especialmente mediático, provocó importantes daños personales: 11 viajeros -dos todavía siguen ingresados- del tren que se dirigía a Zaragoza viéndose sorprendido por las llamas.
El asunto, que cobró especial relevancia en medios nacionales, se encuentra bajo investigación judicial. No obstante, el jefe del Consell, Ximo Puig, aseguró públicamente que el mando del incendio elaboraría "un informe sobre el asunto a petición de la Generalitat". "Se elevará a quien corresponda, a la autoridad judicial y a la opinión pública y ya se tomarán las decisiones correspondientes".