balance desde el inicio de la pandemia hasta enero de 2022

El coste extra de los ingresos en las UCI valencianas por covid se eleva a 126 millones de euros

Foto: EVA MÁÑEZ
30/01/2022 - 

VALÈNCIA. El próximo martes 1 de febrero se cumplirán dos años del primer positivo por covid en la Comunitat Valenciana: un vecino de l'Eliana que había viajado a Nepal y que posteriormente falleció en el Hospital Arnau de Vilanova el día 13 de ese mes, quedando en los registros como la primera defunción de España a causa de esta enfermedad.

Obviamente, las pérdidas humanas son la principal y mayor tragedia causada por esta pandemia, si bien las consecuencias económicas y sociales que se derivan de este terremoto sanitario también resultan fundamentales para evaluar el paisaje global al que se enfrenta la Administración. En este caso concreto, el Gobierno valenciano que dirige Ximo Puig.

El reto más titánico de este proceso ha sido, indudablemente, el sanitario. Capear la inicial escasez de material, reforzar las plantillas, habilitar camas o preparar instalaciones secundarias, fue la primera parte del desafío, que después dejó paso a la organización e impulso de la macrocampaña de vacunación que todavía perdura además del intento de mantener también las prestaciones médicas al margen de la propia pandemia.

Ahora que la sexta ola -quinta en la Comunitat Valenciana- parece que empieza a amainar, no en transmisibilidad, pero sí respecto a la presión hospitalaria, Valencia Plaza se detiene a evaluar un apartado que pone de manifiesto el ingente esfuerzo para las arcas públicas que ha implicado e implica la lucha contra la pandemia.


Así, desde que empezaron a facilitarse datos de la pandemia -en concreto el 17 de marzo de 2020- respecto a los ingresos concretos por la covid en la UCI hasta este mismo viernes, la Generalitat lleva gastados un total de aproximadamente 126 millones de euros extra sólo en el cuidado de pacientes en unidades de críticos de la Comunitat Valenciana.

Una cifra basada en el cálculo que la conselleria utiliza para calibrar el coste de una cama UCI por día y paciente: 1.391 euros, importe que, puntualizan fuentes oficiales, no incluye personal ni farmacia. Así, aplicando una corrección en los fines de semana -donde no se han ofrecido datos de ingresos hospitalarios durante la mayor parte de la pandemia- basada en la repetición de las cifras del viernes, en 2020 el gasto añadido por la pandemia en las UCI fue de 48,3 millones de euros, mientras que el año siguiente, cuando se padecieron las peores consecuencias del virus, fue de 70,3 millones. En 2022, por ahora, el coste adicional de las UCI se cifra en 7,4 millones de euros hasta el pasado viernes.

Un dispendio para las arcas públicas de casi 185.000 diarios sólo en pacientes ingresados por covid en las UCI desde que comenzó la serie de datos por parte de la Conselleria de Sanidad el 17 de marzo, esto es, hace 684 días.


Según los datos facilitados por la Generalitat en sus actualizaciones diarias, el 3 y 4 de abril de 2020 fueron los dos peores días de se ejercicio en las unidades críticas valencianas de ese año respecto a la covid con hasta 384 personas ingresadas. Unas cifras que se dispararon especialmente en enero y febrero del siguiente año, con el aciago récord de 670 pacientes ingresados por covid en las UCI valencianas el 31 de enero del pasado año. 

Un balance de presión hospitalaria muy inferior en la actualidad debido a la vacunación: este mismo viernes se notificaban 195 personas con covid en las unidades de críticos de la Comunitat, unas cifras que, tal y como informó Valencia Plaza este viernes, se mantienen estables desde hace un mes.

Vacunados y no vacunados: los últimos datos

Estos datos de costes diarios de las UCI alimentan un debate que viene sucediéndose en muchos países europeos en las últimas semanas y también en España respecto a las medidas para convencer -o incluso presionar- a los no vacunados. Un dilema que, tal y como muestran estas cifras, tiene un componente humano pero también económico.

Como ya informó este diario, las últimas cifras respecto a ingresos en las unidades de críticos de vacunados y no vacunados reflejan que existe 10 veces más riesgo de acabar en la UCI para los que no han recibido la pauta completa de protección. De hecho, desde el 13 de diciembre hasta el 9 de febrero ingresaron en las unidades de críticos valencianos 118 vacunados (sobre más de cuatro millones de población total con pauta completa) y 145 no vacunados (en torno a 450.000 personas).

Foto: EVA MÁÑEZ

En este sentido, desde el Gobierno valenciano vienen insistiendo en animar a los rezagados a inocularse la vacuna a través de medidas como la prórroga hasta marzo de la exigencia del pasaporte covid para entrar en determinados establecimientos como la hostelería o los relacionados con el ocio nocturno. 

Una situación sobre la que el propio presidente de la Generalitat, Ximo Puig, se pronunció este mismo jueves tras la reunión de la Mesa Interdepartamental contra la covid-19, al ser preguntado por las manifestaciones antivacunas: "Nuestro estado de derecho permite en estos momentos que haya personas que no quieran vacunarse y tienen derecho a no hacerlo. Éticamente me parece que es más dudoso que tengan derecho a mantener esa actitud agresiva contra el gran avance de esta sociedad para la superación de la pandemia", sentenció.

El impacto del virus en las UCI, clave en el reparto de los fondos covid

El elevado coste adicional que soportaron las UCI durante los peores momentos de la pandemia no pasó ni mucho menos desapercibido para el Gobierno, que incluyó como criterio en el reparto del fondo covid la presión en las unidades de críticos. En concreto, esta línea de liquidez, creada para financiar el coste de la pandemia y dotada con casi 14.000 millones, contemplaba el estado asistencial de las UCI en dos de sus cuatro tramos.

De este modo, los ingresos en las UCI condicionaron el 30 % del montante a recibir por las comunidades en el primer tramo del fondo covid y el 25 % en el segundo. La Comunitat Valenciana obtuvo 449,6 millones de euros en el primer caso y alrededor de 263 millones en el segundo. Además del estado de las unidades de pacientes críticos, otros criterios que justificaron el reparto fueron el volumen de hospitalizaciones, las PCR totales realizadas y la población protegida dividida en siete grupos de edad. 

En cuanto a los dos tramos restantes, el tercero, dotado con 2.000 millones de euros, estaba asociado a la educación, mientras que el cuarto, de 5.000 millones, tenía como finalidad la compensación de los ingresos por la reducción de la actividad económica. En total, la Comunitat Valenciana recibió de este fondo covid más de 1.485 millones de euros, lo que supuso el 9,3 % del total repartido por el Gobierno.

Noticias relacionadas

next