VALÈNCIA (EFE). La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha avanzado que el Gobierno está a punto de sacar la convocatoria para adjudicar 1.200 megavatios (MW) de cogeneración para los próximos tres años a la que se comprometió el pasado noviembre.
Ribera ha hecho este anuncio en la sesión de control del Congreso, en respuesta al portavoz de Compromís, Joan Baldoví, que le ha reclamado medidas para que la industria cerámica de Castellón no se vea abocada al cierre por el incremento del precio de la luz y el gas y la falta de materias primas.
La vicepresidenta, que se ha comprometido a "seguir trabajando con este sector crítico, con mucho valor añadido, que ha ido haciendo esfuerzos de modernización desde hace mucho tiempo", ha dicho que comparte la preocupación por la industria cerámica y, en general, por la industria en España.
También ha defendido las medidas adoptadas hasta ahora y ha subrayado que el Gobierno quiere escuchar a los agentes sociales, grupos parlamentarios y comunidades autónomas para consensuar el plan nacional de respuesta a las consecuencias económicas de la guerra.
"La industria electrointensiva tiene problemas específicos que estamos atendiendo, los consumidores de gas tienen problemas específicos y la cogeneracion tiene problemas específicos, que afortunadamente hasta ahora ha podido sortear razonablemente gracias a que la retribución por la electricidad que generaba equivalía al precio de mercado mayorista y con eso podía acudir a comprar el gas que necesitaba", ha señalado.
Ribera ha incidido en que desde la primavera de 2021 se ha producido una "caída drástica del gas ruso a Europa, a la vez que aumentaban drásticamente los precios del gas ruso en Europa y en los mercados internacionales".
Esto indica, según el Gobierno, que "es muy probable que (Vladimir) Putin estuviera ya preparándose para la guerra", a la vez que explica "por qué el precio de la electricidad y las materias primas energéticas se viene incrementando mucho antes de la invasión" de Ucrania.
El diputado de Compromís ha asegurado que la industria cerámica de Castellón ha reducido su producción un 25 % y que ya se han presentado cinco ERTE de las empresas, por lo que "hay un peligro de cierre real de esta industria valenciana y de otros sectores electrointensivos, como el textil", ha advertido.
Ha argumentado además que "hay un problema real de que todo este descontento lo acabe capitalizando la derecha oportunista, la amiga de Putin y la malcriada que tiene soluciones mágicas para todo y que rema siempre a favor de los intereses de las grandes eléctricas, que sí que se están forrando".
Según sus datos, la cerámica de Castellón concentra el 80 % de la industria cerámica estatal, aporta más del 20 % del PIB a la provincia y genera más de 15.0000 empleos directos.
Esta industria, que apostó hace años por la cogeneración, utilizando el gas como fuente energética para sus hornos, de forma que aprovecha ese calor para producir electricidad, consume el 7 % de todo el gas industrial del Estado y gran parte de la arcilla que consume proviene de Ucrania.