VALÈNCIA (EP). El Comité Federal que ha celebrado el PSOE este sábado se ha convertido en un gran acto para trasladar ánimo al presidente del Gobierno y secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez, que se encuentra inmerso en un insólito periodo de reflexión para decidir si continúa o no al frente del Ejecutivo.
Los mensajes de aliento a Sánchez se han sucedido dentro y fuera de la sede socialista en la calle Ferraz con una clara consigna, convencer al presidente de que recapacite y no dimita: "Pedro, quédate", imploró la vicepresidenta primera del Gobierno y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, la primera en intervenir desde la sala Ramón Rubial ante los principales dirigentes del PSOE: ministros, presidentes autonómicos y secretarios generales autonómicos entre ellos.
En la calle, miles de personas llegadas desde distintos puntos de España, en una movilización de última hora, coreaban consignas a favor del presidente: "No estás solo", "basta ya" gritaban en contra de la "campaña de acoso y derribo" en su contra que denunció el propio Sánchez en su carta a la ciudadanía.
El pasado miércoles Sánchez anunció por sorpresa que se retiraba unos días de la vida pública para decidir si continuaba o no en La Moncloa después de que un juez abriese diligencias ante una denuncia contra su mujer Begoña Gómez por tráfico de influencias y corrupción en los negocios.
El anuncio dejó en shock a su propio partido, que no estaba al tanto de los planes del presidente, pero en pocos días reaccionaron y decidieron mantener el Comité Federal que estaba convocado de antemano y convertirlo en un gran acto para mostrar total adhesión con su líder.
En principio, el comité iba a aprobar la lista a las elecciones europeas del 9 de junio que liderara la vicepresidenta Tercera Teresa Ribera, pero las circunstancias obligaron a cambiar los planes y conjurar a todo el partido para que Sánchez decida seguir.
Ha sido una cita inusual, las intervenciones que habitualmente se realizan en privado, sin acceso de la prensa, han sido en abierto y con pantallas gigantes en la calle para que los militantes siguiesen las intervenciones de los líderes del partido en tiempo real.
A su llegada al comité, la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, denunció lo que considera "guerra sucia" del PP y de la "ultraderecha" contra Sánchez y su mujer, que a su juicio lleva en marcha una década, según indicó en declaraciones a los medios a su llegada al Comité Federal.
Minutos después, ya desde el atril, Montero ha lanzado una encendida defensa de Sánchez y también de Begoña Gómez, a la que ha definido como una mujer moderna e independiente que trata de labrarse una carrera profesional y a la que han intentado "destruir".
En su intervención, el secretario general del PSE-EE, Eneko Andueza, conminó a Sánchez a "aguantar" para no dar "carta de naturaleza al odio" y le pidió pensar "en todos los socialistas que perecieron en las cunetas y en los que cada mañana teníamos que mirar debajo del coche" evocando la Guerra Civil y la lucha contra ETA que los socialistas sufrieron en sus propia carnes.
En la misma línea se expresó el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, que le ha pedido que no se rinda y entregue "su cabeza a la derecha" porque a su juicio eso es lo que quieren. Además, para responder a la pregunta que se hacía Sánchez en su carta, si merece la pena seguir, le ha recordado la historia de su abuelo, al que encarcelaron en 1939 "por rojo" y se pasó tres años en al cárcel "recibiendo una paliza diaria".
"Cuando pienso en mi sufrimiento y en el vuestro, pienso en él y estoy seguro de que el mío es mucho más liviano que el suyo y tú eso lo sabes muy bien, por eso no puedes rendirte", se ha dirigido a Sánchez. Mientras tanto, en la calle Ferraz los simpatizantes socialistas recuperaban el 'No pasarán' utilizado por los republicanos contra los nacionales durante la Guerra Civil.
Tras estas intervenciones, a las que también se han sumado las de los tres presidentes autonómicos socialistas, Adrián Barbón (Asturias), María Chivite (Navarra) y Emiliano García Page (Castilla-La Mancha) y el líder del PSC, Salvador Illa, todos cerrando filas con Sánchez, ha tomado la palabra el secretario de Organización, Santos Cerdán y ha pedido terminar en ese momento el Comité y sumarse a la manifestación en la calle donde les esperaban 12.500 personas, según datos de la Delegación del Gobierno.
Aunque todavía quedaba una decena de personas que había pedido la palabra para intervenir, han decidido terminar antes de tiempo y salir a la calle para "abrazarse" con los militantes, según ha expresado Cerdán.
Los líderes socialistas se han dado un baño de masas y se han vivido momentos de máxima emoción, con lágrimas en los ojos de Montero, Puente y la vicelehendakari en funciones Idoia Mendía, superados por la tensión del momento y las muestras de cariño de las bases. Las lágrimas y los abrazos dieron paso a la fiesta cuando empezó a sonar la canción 'Quédate' de Quevedo y a continuación el 'Pedro' de Raffaella Carrá, en una sucesión de mensajes dirigidos a Sánchez.