CASTELLÓ. La compañía castellonense EnerHi vuelve a la carga con nuevos proyectos de energías renovables en la provincia de Castellón tras haber desistido de seguir adelante con las macroplantas fotovoltaicas proyectadas en Vilafamés-Cabanes y en Les Useres que tanto rechazo social despertaron. Eso sí, la estrategia a la hora de plantear estos nuevos proyectos ha cambiado.
Según explica el CEO de la firma, Antoni Llorens, la prioridad ahora es buscar el consenso con los ayuntamientos de los términos municipales donde proyecta nuevas actuaciones. Este es el caso de los consistorios de Catí y de Albocàsser donde EnerHi ya ha solicitado los informes de compatibilidad urbanística para dos proyectos de parques eólicos de siete y seis aerogeneradores respectivamente. También tanteó Vilafamés, donde volvió a plantear al consistorio dos nuevos proyectos de plantas fotovoltaicas. No obstante, y tal y como explica el concejal de Transición Ecológica de Vilafamés, Raül Forcadell, EnerHi desistió tras comunicar el consistorio que las zonas seguían sin ser idóneas.
"Hemos empezado a trabajar primero con los ayuntamientos para abordar futuros proyectos, queremos ir por el camino del consenso con los consistorios y con la población local", asegura Llorens que, explica, quiere evitar episodios pasados en los que los proyectos presentados motivó una gran respuesta social en las comarcas afectadas.
En este sentido, el CEO de EnerHi avanza que uno de los proyectos que quiere impulsar es el de un parque eólico con seis aerogeneradores en el municipio de Albocàsser. Se trata de un proyecto que coincide con las zonas y número de molinos que promueve el grupo andaluz de energías renovables Solar Lighting (GSL) y que, en este caso, ya ha iniciado el proceso administrativo. La compañía andaluza ha presentado el proyecto ante el Ministerio para la Transición Ecológica, que ha abierto el proceso de consultas previas con los ayuntamientos y resto de organismos afectados. El de EnerHi es, de momento, un proyecto de intenciones presentado a los consistorios.
"Hemos tenido reuniones con EnerHi y, en principio, el proyecto se ajusta a la normativa municipal y sí pensamos que podría ser viable y positivo, siempre que sean proyectos ordenados y lógicos, apostaremos por las energías renovables", indica la alcaldesa de Albocàsser, Isabel Albalat. Según explica, la zona elegida por ambas compañías es una que se ubica detrás de la cárcel. Albalat señala que EnerHi ha presentado ya la solicitud de compatibilidad urbanística. El de GSL (un proyecto que los ayuntamientos afectados desconocían) ha iniciado por su parte el proceso para obtener la Declaración de Impacto Ambiental. Ambos proyectos son competidores en cuanto al parque de Albocàsser, aunque el del grupo andaluz ha tomado la delantera al iniciar el proceso ambiental.
No obstante, Llorens explica que estas actuaciones que están proyectando estarán supeditadas a la aprobación de una subestación eléctrica en Vilafamés o en las proximidades de forma que la línea de evacuación no tenga que atravesar casi toda la provincia hasta Betxí. Algo que, según explica, es uno de los grandes factores de rechazo.
En este sentido, el de GSL (un proyecto de tres parques eólicos en la comarca de l'Alt Maestat que, juntos, suman 44 aerogeneradores y una potencia de 264 megavatios) incluye la creación de una línea aérea de alta tensión hasta la subestación eléctrica de Betxí para transmitir toda la energía eléctrica generada por los parques. Esta línea de evacuación se plantea con una longitud de casi 50 kilómetros a lo largo de once términos municipales hasta conectar con Betxí. En concreto, el proyecto contempla que la línea cruce Culla, Atzeneta, Les Useres, Vilafamés, Sant Joan de Moró, Borriol, Castelló, Almassora, Onda, Vila-real y Betxí.