CASTELLÓ. Enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas se concentrarán, el próximo 22 de febrero, en los hospitales de las capitales de provincia de todo el Estado para denunciar que estos centros sanitarios se encuentran “enfermos” por los graves problemas de recursos y medios que ya sufrían antes de la pandemia y que han ido empeorando en los últimos meses mientras las distintas administraciones públicas y los partidos políticos “miran hacia otro lado y no apuestan por resolver una situación que perjudica tanto a la ciudadanía como a los profesionales”.
Tras el éxito de convocatoria de las concentraciones realizadas, el pasado 10 de febrero, en los centros de salud de las diferentes comunidades autónomas, el Sindicato de Enfermería, Satse, continúa en todo el Estado su nueva estrategia de acciones reivindicativas y movilizaciones en defensa de la sanidad y sus profesionales, las cuales irán aumentando en intensidad a lo largo de los próximos meses.
En las concentraciones se denunciará la grave sobrecarga y presión asistencial que se sufre en los hospitales, así como el empeoramiento en la atención y cuidados que se prestan a más de 47 millones de ciudadanos. Un claro ejemplo es el aumento de las listas de espera para consultas externas, pruebas diagnósticas o intervenciones quirúrgicas, o que las situaciones de colapso y caos en servicios tan sensibles, como Urgencias, se repiten de manera continua.
Por su parte, las enfermeras y enfermeros siguen teniendo que atender y cuidar hasta 20 y 25 pacientes en las plantas donde se encuentran ingresados y hasta tres y cuatro personas en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCIs), con repercusiones graves en la calidad y seguridad asistencial y en la propia salud laboral de los profesionales. La ratio segura está entre 6 y 8 pacientes en planta y 1-2 personas por enfermera en las UCIs, según numerosos estudios y análisis científicos nacionales e internacionales realizados.
El grave problema de la temporalidad también afecta especialmente a las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas que trabajan en los hospitales de nuestro país, ya que uno de cada tres profesionales encadena contratos temporales que precarizan su labor y la conciliación con su vida personal y familiar. “Siempre pendientes del teléfono para poder trabajar unas horas, días o semanas en centros y unidades distintas, con el consiguiente perjuicio en la atención y en su situación profesional y personal”, apunta Satse.
Después de dos años de lucha contra la pandemia, los profesionales de Enfermería y Fisioterapia acudirán a la concentración con un claro desgaste a nivel físico, psicológico y emocional, teniendo en cuenta, además, que, en el caso de las enfermeras y enfermeros, trabajan a turnos, de noche y durante los domingos y festivos. Por ejemplo, una enfermera puede llegar a trabajar hasta 15 noches en un mes con jornadas de diez y doce horas seguidas.
Las concentraciones se realizarán, a las 10.30 horas, en los hospitales de las capitales de provincia y Satse espera contar con la presencia y participación activa de numerosos profesionales que quieran expresar, de manera firme y rotunda, que la situación no puede continuar así por más tiempo y que todos los responsables públicos deben priorizar, con más medios y recursos, a los centros hospitalarios en los que son atendidas y cuidadas decenas de miles de personas todos los días.
El Sindicato subraya que las cerca de 400.000 enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas que hay en nuestro país son el motor de desarrollo de la sanidad, tanto pública como privada, y también tienen la llave para el cambio que necesita el SNS, por lo que se muestra convencido de que “la ola de movilización y reivindicación profesional que ya se ha generado en el conjunto del país será cada vez mayor”.
En este sentido, Satse hace un llamamiento a la participación a todos los profesionales que han mostrado de manera reiterada, y través de las redes sociales y otras formas de comunicación, su hartazgo y profundo malestar por su precaria situación y que, por ello, vienen demandando todo tipo de movilizaciones y acciones de presión social.
“Empezamos en los centros de salud, continuamos en los hospitales y en próximas fechas seguiremos denunciando en los centros y en las calles que la salud y seguridad asistencial solo se garantiza con un sistema sanitario fuerte, cohesionado y con los medios y profesionales suficientes. Si las administraciones y partidos no reaccionan, la desaparición de nuestro sistema sanitario, tal y como le conocemos, será un hecho irrefutable”, concluyen desde Satse.