CASTELLÓN. El equipo masculino del UBE L’Illa Grau vive un momento dulce después de ganar cuatro de los seis partidos de Liga disputados hasta ahora. La pasada temporada se salvó del descenso en la última jornada y en el curso actual se encuentra en quinta posición de la principal categoría del voleibol español y con los mismos puntos que el cuarto clasificado. Con una plantilla mejorada, el conjunto castellonense se ha fijado metas ambiciosas. La primera es clasificarse para la Copa del Rey, que se celebrará en febrero de 2019 en Melilla. Para ello necesita finalizar la primera vuelta entre los cinco mejores, algo que, a falta de cinco partidos, está cumpliendo. Su entrenador, Enric Bescós (Tarragona, 1980), ex jugador del primer equipo e integrante del cuerpo técnico desde hace varias temporadas, cumple su segunda campaña como primer entrenador.
-¿Se esperaba un comienzo de temporada tan brillante?
Un objetivo que teníamos era mejorar lo del año pasado y la verdad es que no nos esperábamos tan buen comienzo. También hemos tenido la suerte de contar con una nueva incorporación: Pablo Kukartsev, un hombre de la casa que ha jugado en equipos muy buenos por toda Europa. Viene con mucha confianza y con un nivel que nos está ayudando a consolidarnos y a conseguir victorias.
-Con las novedades que se han producido en la composición de la plantilla, ¿se puede aspirar a algo más que la permanencia?
-Sí, desde luego. Vamos a por todas en cada partido, el grupo tiene máxima confianza en seguir sacando resultados y estamos trabajando bien. La plantilla ha mejorado respecto a la campaña pasada y desde el club estamos muy contentos con los jugadores y con el rendimiento.
-¿Qué metas tiene el equipo para este curso?
-El primer objetivo que nos hemos marcado es clasificarnos para la Copa. No es fácil, porque entran los seis mejores de la primera vuelta y, en este caso, como el organizador es el Melilla y no va muy bien en la clasificación, entrarían solo los cinco primeros. Sabemos que es difícil, pero creemos que está a nuestro alcance y queremos luchar por ello.
-Llama la atención lo bien que se maneja el equipo en las situaciones críticas. En el partido contra el Barcelona se levantó un 24-22 en el tercer set que fue clave para ganar...
-Sí. Son situaciones que se repiten en los partidos, donde hay resultados ajustados en el segundo o tercer set que marcan el ritmo del partido para el que se lo acaba llevando. Estamos teniendo buen resultado en esos escenarios, cuando el año pasado habíamos perdido muchos sets parecidos. Esta temporada hay confianza, el grupo trabaja bien y en los momentos difíciles saca pecho.
-Se ha puesto bonita la Liga este año, con tanta igualdad…
-Es una sorpresa agradable que exista esa competitividad. Creo que este año ha subido el nivel de la Liga, los equipos están muy preparados, incluso los que están abajo en la tabla. Hay muchos partidos que se deciden por puntos en sets clave. Esa igualdad hace que la Liga sea entretenida y tenga una buena acogida por parte del público.
-Ante esa reducción de distancias que se ha producido entre equipos tradicionalmente punteros y el resto, ¿sería realista pensar en pelear por acabar la Liga en puestos de play off por el título (cuatro primeras posiciones)?
-En el deporte nunca hay que plantearse objetivos imposibles, pero somos conscientes de que es complicado acabar entre los cuatro primeros. La Liga es muy larga y sabemos de nuestras limitaciones de presupuesto. Somos un equipo que tiene que trabajar mucho y cuidarse de no tener lesiones. Pero mientras salgan las cosas, no queremos renunciar a nada porque esta plantilla quiere creer en objetivos grandes.
-¿Qué subrayaría de su etapa al frente del equipo, ahora que cumple su segunda temporada como primer entrenador?
-La satisfacción más grande es haber cumplido mi objetivo personal de poder ir mejorando pequeñas cosas año a año para ir haciendo un proyecto mejor y más competitivo. Hemos podido ver esa evolución en el grupo, en la manera de trabajar e incluso en la formación del cuerpo técnico, en ampliarlo y buscar colaboraciones por todos lados.
-¿Cuáles son las perspectivas del club de cara a las próximas temporadas?
-El futuro es ilusionante. Hay bastantes jóvenes de la casa que pueden acceder al primer equipo y siempre contamos con la ayuda de chicos de Castellón. Tenemos ganas de hacer un proyecto a largo plazo e ir mejorando año tras año. Estamos contentos porque estamos dando la cara tanto a nivel masculino como femenino y estamos sacando las cosas adelante con gente de la casa y de la provincia.
-¿La cantera puede ser la base para consolidar al equipo en la élite?
-Sí. La idea es mejorar el club a nivel de base y está claro que es complicado conseguir chicos que al final se puedan dedicar a esto y jueguen en el equipo profesional. Pero se trata de ir aumentando los equipos y la profesionalidad de los entrenadores y hacer un proyecto cada vez más grande y más serio. También necesitamos conseguir chicos de Valencia y de otros sitios cercanos. El buen nivel que hay en la Comunidad Valenciana nos ayuda a creer que podemos consolidar proyectos con gente de lugares cercanos.