CASTELLÓ. Combatir la despoblación es el principal caballo de batalla en los municipios del interior de Castellón. En esa línea, el Ayuntamiento de Forcall tramita un cambio urbanístico que flexibilizará los usos permitidos en las parcelas dotacionales municipales con el objetivo de que puedan ser destinadas a la construcción de viviendas públicas.
El consistorio pretende usar este patrimonio para dinamizar el pueblo e incentivar oportunidades laborales y de empleo a gente de fuera en situación de exclusión social, por eso se flexibiliza el uso permitido en estos edificios municipales. "Una de las apuestas a futuro es crear vivienda pública dentro de nuestras limitadas posibilidades económicas. Vamos a pedir la ayuda Recuperem Llars, de la Generalitat, para rehabilitar y crear un pequeño parque público", resalta el alcalde de Forcall, el socialista Santiago Pérez.
El Ayuntamiento posee un apreciable patrimonio inmobiliario -tanto de inmuebles como de solares urbanos- procedente de donaciones y de herencias de vecinos que fallecieron sin descendencia. Además, también dispone de varios edificios municipales, como la antigua escuela o el viejo Ayuntamiento, ambos hoy en desuso. El consistorio quiere reorientar el modelo urbanístico de Forcall a otro más sostenible para luchar contra el éxodo rural, la despoblación y el envejecimiento. "Ahora mismo disponemos de dos viviendas en propiedad. Una la compramos hace años para ese fin y la otra procede de una donación pendiente de firmar ante notario", explica el alcalde.
Con esta modificación puntual número 1 del PGOU de 1993, esos solares y edificios municipales sin uso podrán destinarse para la construcción y adecuación de viviendas públicas que incentiven la llegada de nuevos vecinos atraídos además por una oferta de empleo. El consistorio, según recuerda Pérez, impulsó hace una década 11 viviendas públicas en una parcela municipal.
A su vez, esta variación del PGOU en ciernes también facilitará la construcción de nuevas viviendas desde la esfera particular. Forcall, al igual que sucede con la práctica totalidad de municipios del interior provincial, no es atractiva para la gestación de grandes promociones inmobiliarias, por lo que habitualmente la construcción de nuevas viviendas llega de la mano de pequeños propietarios de solares urbanos que deciden invertir sus ahorros en levantar una casa como segunda residencia familiar.
La modificación del PGOU en tramitación, que según el alcalde verá la luz en los próximos días, reducirá la altura mínima exigida en los solares urbanos, por lo que también bajará la edificabilidad. A su vez, en la avenida del Pilar se rebajará la edificabilidad permitida del actual tope de planta baja más tres alturas a planta baja más dos alturas.
Por su parte, el Ayuntamiento de Vistabella también tramita una modificación puntual de sus Normas Subsidiarias -la séptima- para coser urbanísticamente el límite noreste del casco urbano. El objetivo es eliminar las medianeras y cerrar la trama urbana en ese punto. Además, en la zona del casco urbano de Eres de Troia se cambiará la calificación del suelo dotacional municipal para construir un equipamiento educativo y cultural.
El consistorio pretende desbloquear la tramitación de esta modificación, que paralizó la Comisión Territorial de Urbanismo en el año 2018 por discrepancias con la ordenación del ámbito noreste del casco urbano.
