CASTELLÓN (EFE). La plataforma vecinal Frenem la Contaminació tratará de conseguir que un grupo de eurodiputados visiten el Grao, el polígono del Serrallo y el puerto de Castellón "para comprobar" que las directivas europeas de calidad del aire "se están incumpliendo". Este es uno de los logros de de la delegación de la asociación ciudadanaque ha pasado los dos últimos días en Bruselas, donde se ha reunido con técnicos de la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea, responsables de diferentes partidos o el vicepresidente de la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo, Pál Csáki. Este "se ha mostrado interesado por la problemática y se ha comprometido a hacer un seguimiento para que el asunto sea tratado en la Eurocámara", han señalado las tres integrantes de la plataforma que han viajado a la capital europea, Inés Turpin, Eva Forés y Eva Ramírez.
La plataforma también ha presentado en la sede bruselense del Parlamento Europeo una reivindicación para que los medidores de la calidad del aire del Grao y el puerto de Castellón estén situados en los espacios exigidos por la directiva europea. En este sentido, la eurodiputada castellonense de Izquierda Unida y miembro de la comisión de Peticiones de la Eurocámara Marina Albiol considera que debe ser el Parlamento Europeo "el que se ponga en contacto con las autoridades locales y autonómicas para exigir que los medidores de la calidad del aire estén situados en las zonas que indica la Comisión Europea (CE)".
No en vano, Albiol apunta que, en opinión de la plataforma y de ella misma, "se están incumpliendo directivas europeas de control de la contaminación". Según la eurodiputada grauera, todo "apunta a que existen aspectos importantes que no están siendo gestionados adecuadamente", entre estos, "el hecho de que los medidores estén situados lejos de las zonas residenciales, que no se contemplen los malos olores que afectan a la población como un problema medioambiental o las condiciones en que se almacenan los graneles en el puerto, sin recubrimiento".
Y es que esta problemática de malos olores "está contemplada en la legislación europea como un motivo para revisar los permisos" de emisiones que la Generalitat valenciana otorga a las empresas, apunta Albiol. Por este motivo, la propia eurodiputada y la plataforma pedirá al Gobierno valenciano que revise estos permisos.
En la rueda de prensa en que han hecho balance de las reuniones de los dos últimos días, Ramírez ha resaltado la reunión que han mantenido con al eurodiputada italiana Eleonora Forenza, quien les ha trasladado que la región de Taranto vive "un problema similar al nuestro y la propia Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo envió una misión de eurodiputados para investigar el cumplimiento de las directivas europeas. Por tanto, queremos que el Grao también sea tenido en cuenta".
Por su parte, Forés ha destacado que el núcleo poblacional del Grao y de la playa de Almassora "vivimos a escasa distancia de un complejo industrial petroquímico de más de cuatro millones de metros cuadrados y tenemos que sufrir unos problemas que nos hemos encargado de trasladar a las autoridades locales y autonómicas sin obtener las soluciones que necesitamos". Ante esto, como ha señalado Turpin, "desde la plataforma esperamos que las instituciones europeas se ocupen de nuestro caso, atiendan nuestra petición e insten al Ayuntamiento de Castellón y a la Generalitat valenciana a aportar las soluciones necesarias para que podamos vivir en un Grao limpio y saludable".