CASTELLÓ. Pamesa no cesa en su política de crecimiento constante. El gigante azulejero comandado por Fernando Roig ha activado ya los 70 millones de euros -cifra que el propio empresario dio en una rueda de prensa en abril- con los que está construyendo dos grandes centros de tratamiento de materias primas.
De hecho, la instalación que está alzando en Onda se encuentra ya bastante avanzada y la previsión es que las obras puedan estar concluidas este mismo año, toda vez que en abril el Ayuntamiento le otorgó los permisos para acometer los trabajos, según señalaron fuentes municipales en su momento.
La construcción, que se está desarrollando junto a la planta de Arcillas Atomizadas, compañía integrada en Grupo Pamesa y que abastece de materias primas a diferentes factorías azulejeras del conglomerado cerámico, ha concluido ya para dos de los boxes de los que constará la nave. Tanto es así que fuentes conocedoras apuntan que está previsto que la carga del próximo gran buque que llegará al puerto de Castellón repleto de arcilla para el grupo ya desvíe directamente el material desde las bodegas a este nuevo centro de materias primas.
No en vano, uno de los objetivos que tienen ambas instalaciones logísticas es la de permitir la salida de parte del material que Grupo Pamesa ha ido acumulando en los últimos años en el puerto de Castellón y más concretamente en la dársena sur, donde gestiona en concesión varias parcelas para el almacenamiento de arcilla a cielo abierto.
En las campas del Grau de Castelló, el conglomerado azulejero acumula productos como "feldespato de Turquía o arcilla de Ucrania", tal y como señaló Roig en la rueda de prensa de abril.
Más retrasado se encuentra el centro logístico de 134.394 metros cuadrados procedentes de cuatro parcelas anexas a la factoría de TAU, en Castelló. Por ahora simplemente se ha iniciado el movimiento de tierras. No en vano, para construir estas futuras instalaciones de secado y almacenamiento de arcillas y feldespatos la compañía todavía debe obtener diferentes permisos.
Así, tramita ante a la Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad una Declaración de Interés Urbanístico, ya que los terrenos en los que se asienta no son urbanizables. Este trámite se encuentra en su fase inicial. Asimismo, y según indicó el presidente de Pamesa en abril, la infraestructura también está pendiente de la aprobación del Plan General de la capital de la Plana, que debe regular el uso del suelo para las próximas décadas.
Exactamente la mitad de los terrenos estarán techados para el almacenamiento de las arcillas y feldespatos. Asimismo, habrá una zona de garaje y taller para el mantenimiento de las máquinas necesarias para la manipulación de los materiales; y un control de acceso a las instalaciones, según consta en el proyecto. Otra gran zona (el 31% de la superficie) quedará "en su estado original" y habrá zonas pavimentadas y una pantalla vegetal en su fachada para reducir el impacto visual.