VALÈNCIA. Idilia Foods, fabricante de Cola Cao, aumentó un 1% sus ventas hasta los 178 millones de euros. Así lo recogen las cuentas de la compañía depositadas en el Registro Mercantil. Propiedad de Ignacio Ferrero, miembro de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) desde 2018, la firma redujo beneficios de los 17,5 millones a los 15.
La compañía, especializada en la fabricación de productos alimenticios elaborados con cacao en polvo, inauguró en 2019 nuevas instalaciones en Parets del Vallés (Barcelona) desde donde ha integrado la elaboración y las operaciones logísticas de las marcas Cola Cao, Nocilla, Paladín y Mesura.
"La sociedad ha mantenido su nivel de ingresos respecto al 2020 acrecentando su posición de líder de mercado tanto en la categoría de cacao soluble como cremas de untar", señala el informe de gestión que acompaña a las cuentas. En relación con esto, la sociedad entró en el mercado de galletas y helados en el 2021.
"La innovación se ha reforzado como eje fundamental dentro del catálogo de productos y referencias de la sociedad, continuando con una apuesta por productos de mejor perfil nutricional y envases más saludables y respetuosos con el medio ambiente", continúa la compañía, que en 2021 empleaba a 329 personas.
Las previsiones de la sociedad respecto a la coyuntura económica en 2021 se cumplieron, y el aumento de precios en materias primas junto con el alza de los precios agrícolas iniciado en 2020 hacían prever un contexto altamente inflacionista a largo plazo, donde el precio los combustibles y suministros se sitúan en el epicentro de dicha tasa de crecimiento.
"Hay que añadir el impacto concatenado de dichos problemas y la merma de oferta por encarecimiento de componentes tecnológicos y transporte. Todo ello ha afectado de manera notable a los costes de producción de todo el sector industrial, cerrando el 2021 el IPC en un 6% y situándose en un 9,8% en marzo de 2022, sin perspectivas de mejora en el corto-medio plazo", destaca el documento.
La compañía confiaba plenamente en que no se vería impactada de manera significativa, esperando alguna reducción en la cifra de negocios y quizás de los márgenes, aunque sin llegar a poner en riesgo la solvencia y continuidad de la misma.