VALÈNCIA (EP/CP). Este sábado 9 de abril se ha celebrado en València un evento crucial para la creación literaria y las artes, tal y como lo comentaba la vicealcaldesa Sandra Gómez. Tras tres décadas los Premios Nacionales de la Crítica han vuelto a València, y la Asociación Española de Críticos Literarios (AECL) ha dado a conocer el fallo del jurado para los mejores textos de poesía y narrativa en castellano, catalán, vasco y gallego. En lengua castellana los premiados han sido el escritor Jordi Ibáñez (en la categoría de narrativa) por Inferno, Purgatorio, Paraíso; una novela definida como una tragicomedia onírica y brutal que a su vez resuelve de forma audaz el proceso político catalán desde el posgranquismo hacia un futuro "imaginario y espectral" en palabras de su autor. La poetisa Mª Ángeles Pérez ha obtenido el galardón por su obra Incendio mineral, un poema en prosa que viaja por la idea de los cuerpos habitados por palabras.
En lengua catalana Borja Bagunyà ha sido premiado por Els angles morts, la primera novela del autor en la que este emplea el exceso y la parodia para distanciarse del realismo a través de la historia de un matrimonio sin hijos cuya rutina se ve afectada por la llegada de su sobrino Olof. El poeta Joan Todó ha sido reconocido por La vista als dits, donde recopila dos poemarios ya publicados y dos inéditos. En lengua gallega, Diego Ameixeiras ha resultado premiado por O cervo e a sombra; una obra sobre ángeles custodios y de demonios que habitan en el interior de cada uno. E sol era Ela de Medos Romero, ha resultado premiado por su delicadeza para hablar sobre la maternidad y la filiación a través de poemas "luminosos" que se materializan a través de la naturaleza.
En lengua vasca, han sido galardonados Kirmen Uribe, por Izurdeen aurreko bizitza (La vida anterior de los delfines) que describe la vida de la pacifista Rosika Schwimmer y establece dos focos en la historia, uno desde Nueva York y otro desde País Vasco. Itziar Ugarte, ha sido reconocida por su poemario Gu gabe ere (Incluso sin nosotras) en el que emplea la memoria silenciada de las mujeres como eje de todo el relato, esta es la ópera prima de la joven autora, y cuenta con 91 poemas en ella. Por últimos e ha otorgado por primera vez en la historia de los premios un reconocimiento a la Lengua Extranjera, lo ha recibido Maggie O'Farrell por Hamnet, un libro que cuenta la historia de Agnes quien tuvo dos hijos gemelos llamados Hamnet y Judith, cuatro años más tarde de que el niño falleciera a los 11 años de edad su padre William Shakespeare escribió una obra de teatro a la que puso por título el nombre de ese niño, con una grafía equivalente de la época: Hamlet.