Nadie se va a quedar atrás en esta crisis, eso han dicho, eso es lo que dicen siempre. Lo importante son los hechos, y los hechos dicen otra cosa. No es la mentira, es la desfachatez con la que se miente la que hace de esta situación algo insoportable. No hace mucho, esto era una gripe, pasajera, no iba a caer nadie, era muy poco probable, las proyecciones, las estadísticas, los epidemiólogos, nadie lo había visto venir. Con esos argumentos vamos a la segunda gran crisis del siglo XXI, veremos lo que dura. La verdad es que ya no se esmeran ni en las excusas, ahora la culpa es del Covid-19, si no aguantamos 30 días parados no es por el bicho, es por la falta de ahorro y el exceso de deuda.
Retransmitida en directo desde hace mes y medio, comentada, analizada, subestimada y negada. Eso no va a llegar aquí. Cada día que pasaba más países contagiados, más casos, más muertes, pero aquí el olor a pólvora, la reivindicación, nuestros propios intereses y la falsa creencia de seguridad en la que vivimos arropados por el Estado. Ese Estado que no va a dejar a nadie atrás, pero que te pide que aceleres el ritmo, que hay que ir con paso ligero. Ahora no podemos repartir culpas, estamos en estado de alarma, más de uno va a tener que revisar lo que ha hecho este último mes y medio y las intenciones con las que lo hizo, revisar si fue un agradaor o fue un crítico y escéptico profesional. La hemeroteca ya no es lo de antes, ahora es pública y al alcance de cualquiera. Este día en el que escribo vuelve a hablar Fernando Simón al que le han preguntado por la evolución del coronavirus, la evolución era la esperada, ya era previsible, las proyecciones ya cuadran, las estadísticas funcionan. Hoy era lo esperado, hay tantos muertos, pero solo han muerto lo que se esperaba.
SÁnchez Ha anunciado las medidas que van a servir para paliar el desastre retransmitido desde hace mes y medio en directo
Pedro Sánchez ha puesto cara de presidente, después del bochorno del sábado de inicio del estado de alarma. Ha anunciado las medidas que van a servir para paliar el desastre retransmitido desde hace mes y medio en directo. 200 mil millones de euros. La noche que se rescataron a las cajas de ahorro de España intervino la Unión Europea, muchos recordarán aquellos días, llamadas, presiones, anuncios, la amenaza de la troika, aquel día fueron 40 mil millones de euros. Hoy son 200 mil millones y ni una sola llamada, un consejo de ministros, telemático. Nadie se va a quedar atrás en esta crisis, pero aligera el paso. De esta crisis, temporal, algo que ha repetido en muchas ocasiones se va a hacer cargo el Estado.
A nadie se le escapa que se ha suscitado un poco de debate sobre el papel de lo público y lo privado en tiempos de crisis, pocos han sido ajenos a los rumores, interesados o no, sobre la discusión entre ministros por la nacionalización de empresas. Serán o no ciertos, ya lo veremos con el tiempo, pero hoy, esas que se presuponían amenazadas de ser nacionalizadas el sábado, van a pagar 83 mil millones de euros para paliar los efectos de la crisis, subían con fuerza en bolsa después del anuncio, debe ser que tenían previsto perder más.
Cien mil millones de euros para avales, los bancos, que también van a pagar una parte de la crisis en forma de moratoria para los préstamos hipotecarios de la vivienda habitual, van a dar créditos por ese importe avalados por el Estado, es decir, que no es ni déficit, hoy por lo menos. Ya veremos el año que viene si la cosa no mejora. Esos avales son un dardo envenenado al sistema financiero, too big to fail.
Se han quedado fuera los autónomos que por cualquier circunstancia no han perdido del todo su negocio, los que habiendo reducido sus ventas significativamente, no han descendido por encima del 75%, para todos ellos, nada.
Por último, 17 mil millones de euros para cubrir la parte de los ERTE y del cese de actividad de los autónomos que no cubría la legislación actual, principalmente. Lo verdaderamente novedoso era eso último, proteger a los que por cualquier circunstancia no tuviesen derecho al paro, trabajador o autónomo. Cuidado que eso no abarca a todo el mundo. Ese es el esfuerzo adicional que va a hacer el Estado, lo público. Se han quedado fuera los autónomos que por cualquier circunstancia no han perdido del todo su negocio, los que habiendo reducido sus ventas significativamente, no han descendido por encima del 75%, para todos ellos, nada. Un silencio. Buscaos la vida, negociad retrasos en el pago del alquiler del local, el pago de proveedores, pero la cuota de la Seguridad Social no, esa no es negociable.
Pero bueno, hay cien mil millones en avales para pedir un préstamo, ah no, que los avales son para las empresas que se han visto obligadas al cierre por el estado de alarma, el resto habéis estado abiertos, los avales no son para vosotros.
De lo anunciado, solo 17 mil millones para paliar los efectos de la crisis, eso no llega al 2% del PIB, pero esto es España, aquí con un poco de imaginación puedes decir que es el 20%.
Esto no es una crisis apta para los aficionados del marketing político, no hay un manual ni un tutorial que te diga la respuesta correcta, por lo menos un poco de humildad y más sinceridad, no digas que nadie se va a quedar atrás y te dejas a 3 millones de autónomos encerrados en casa esperando a que el 31 de marzo el banco cargue en cuenta la cuota de la Seguridad Social.