CASTELLÓ. Conseguir mesa en Kamikaze Street Food es un éxito. En apenas dos semanas desde su apertura en el icónico local de la Calle Dolors, reconvertido gracias a una brillante ambientación en una callejuela de Honk Kong, los sabores exóticos de platos que fusionan el producto local con las experiencias viajeras de Adrián López inundan todo el espacio.
Hornos de barro Tandoori de procedencia india, woks en constante ebullición en una parada acristalada de la que cuelgan patos estilo Malasia o pollos especiados, platos que se sirven sobre papeles y presentaciones rompedoras.
El espectáculo de la cocina en vivo frente al cliente, la explicación e historia de cada plato si eres uno de los 10 afortunados que has conseguido plaza en la barra de cocina. No hay otras propuestas similares en la zona, el carácter diferenciador y único forma parte sin duda del éxito del conjunto.
A su vuelta abrió en el centro de Castellón un local/barra para 10 comensales donde expone su propuesta. En pocos días conseguir un espacio en esa barra se convirtió en el deporte favorito de "foodies " y aficionados a la gastronomía diferente. Han pasado 5 meses y ahora da el salto a este nuevo espacio en Benicàssim.
Rodeado por un equipo de cocineros jóvenes con mucha formación, y con la amplia terraza dirigida por Alba Quintana, Kamikaze Benicàssim se convierte en el "must" del verano en la zona y las redes sociales se inundan de fotos de sus neones rojos, de su peculiar fachada negra con motivos asiáticos, de los patos Honk Kong, o de sus impresionantes albóndigas y neems vietnamitas.
Acompaña una amplia carta de cervezas del mundo, con variedades también asiáticas, y la cuidada carta de vinos y Champagnes para maridar con la espectacular selección de postres creados por Mario Padial en exclusiva para Adrián, todo ello con el sonido de fondo del R&B de Russ con el bass a tope y las llamaradas de los woks creando un ambiente único.
No hay nada igual; ni parecido. No tarde en reservar.