CASTELLÓ (EP). La alcaldesa de Castelló, Begoña Carrasco, ha anunciado este martes en rueda de prensa que el Ayuntamiento acometerá una bajada de impuestos durante toda la legislatura de "manera progresiva", que en 2024 permitirá un ahora de más dos millones de euros a los castellonenses, concretamente 2.006.549,90 euros.
Así, el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) experimentará una rebaja del 4 por ciento, pasando el coeficiente del 0,69 al 0,66, lo que propiciará un ahorro de 1.011.683,62 euros, y esto -según ha explicado Carrasco- "sin perder calidad del resto de servicios públicos".
La rebaja en el Impuesto de Plusvalía permitirá un ahorro a los castellonenses de 292.688,28 euros, mientras que la bonificación mortis causa pasará del 25 al 50 por ciento, lo que supondrá un ahorro a los ciudadanos de 240.000 euros.
Así mismo, la suspensión total de la tasa de ocupación de vía pública beneficiará a 750 terrazas, que se ahorrarán 350.000 euros. Además, el BICE sufrirá una bajada impuesta del valor catastral del Puerto, que supondrá una rebaja fiscal de 112.178 euros.
Carrasco ha explicado que las nuevas ordenanzas fiscales serán aprobadas en el próximo pleno, "con el fin de que el presupuesto del Ayuntamiento entre en vigor en enero", y ha añadido que están en revisión todos los impuestos, por lo que durante la legislatura podrían experimentar un descenso otros como el IAE o el ICIO.
El concejal de Impulso Económico, Empleo y Capital Humano, Juan Carlos Redondo, ha explicado que, además, en 2024 el Ayuntamiento dejará de ingresar 1.600.000 euros de la factura de Reciplasa, "que asumirá el consistorio y no repercutirá en los castellonenses, de tal forma que el recibo de la basura se quedará igual".
Por su parte, el portavoz adjunto del equipo de gobierno, Antonio Ortolá, ha señalado que "una vez más Vox cumple con lo prometido antes de las elecciones en conjunto con el equipo de gobierno, puesto que era una prioridad bajar impuestos y reducir el gasto innecesario, que tendrá también su reflejo en los presupuestos".
Ortolá también ha anunciado que se pondrá en marcha un plan de seguridad para preservar el mobiliario público y reforzar la vigilancia en edificios públicos y privados.