CASTELLÓN. La elección de candidato para liderar la lista de Ciudadanos a las elecciones municipales del próximo 26 de mayo en Castellón parece complicarse cada día y corre ya el riesgo de acabar en una confrontación entre los postulados que defienden la dirección local, autonómica y nacional. Tras dos meses de continuas filtraciones de nombres en los que no han faltado antiguos dirigentes del PP, como es el caso de la exsecretaria general del grupo parlamentario popular en les Corts, María Fernanda Vidal, o el exedil José Masip, la junta directiva local decidió ayer proponer como alcaldable al médico Alejandro Marín Buck, en clara respuesta a la última lista filtrada a los medios y que encabezaba el conocido neurocirujano Jesús Merino.
La junta local del partido daba así un paso al que, estatutariamente, no está autorizada, puesto que la elección de candidatos debe hacerse a través de la dirección nacional a propuesta de la autonómica. Ciudadanos Castellón no puede celebrar primarias al contar con un censo de afiliados menor a los 400 miembros, el mínimo exigido en las normas internas del partido. "Es nuestro candidato, al que hemos elegido por unanimidad", según se justificaban miembros de esta dirección local, cuyo interés, según explican, era "rebajar el ruido" que se está produciendo alrededor de la elaboración de la lista y poner fin a los movimientos "subterráneos" y filtraciones mediáticas que se vienen produciendo desde hace meses, explican.
"Había que atajar esto y hemos dejado claro a qué candidato preferimos para que sea nuestro futuro alcalde", explican. Paralelamente, fuentes de la dirección autonómica y nacional advierten de que este paso dado por el órgano local puede ser "merecedor de la apertura de un expediente disciplinario". Otros testimonios comparten que se trata de un comportamiento "fuera de los cauces del partido, puesto que dan de lado a los responsables regionales y nacionales de organización".
A partir de ahora, la dirección nacional tendrá la última palabra para cerrar una lista a las municipales de Castellón, en tanto desde la agrupación local se espera que su propuesta sea tenida en cuenta. "De no ser así, ya se verá. Somos conscientes de que la decisión última la tiene la dirección nacional, pero también hay que tener en cuenta que esta candidatura sale de forma unánime desde el órgano local", esgrimen.
Finalmente, miembros destacados del partido a nivel local -que prefieren guardar su anonimato- coinciden en reconocer su temor a que esta situación se derive en un nuevo 'pufo' como el ocurrido en Valladolid, fruto del enfrentamiento entre la dirección local de la formación naranja, la autonómica y nacional en pleno proceso de confección de listas, a poco más de dos meses de la cita con las urnas y con las encuestas desinflando las expectativas iniciales de la formación naranja.
"Nuestra intención es ser siempre realistas, y nos gustaría no dejar de ser la voz de nuestros votantes. Es posible que veamos reducidos el número de cargos electos, pero salimos con la idea de mantener representación en los municipios donde estamos y si es posible aumentar la representación en más municipios"