Las mejores imágenes de la retirada de la cruz de Ribalta (Fotos: Antonio Pradas)
Las mejores imágenes de la retirada de la cruz de Ribalta (Fotos: Antonio Pradas)
Las mejores imágenes de la retirada de la cruz de Ribalta (Fotos: Antonio Pradas)
CASTELLÓ. El Acord de Fadrell por fin saca la cruz del Ribalta de Castelló tras más de un lustro de polémica y procedimientos judiciales. El monumento, considerado como un vestigio del franquismo según el catálogo de la Conselleria de Calidad Democrática, ya no forma parte del conjunto histórico y patrimonial del parque. Bajo un amplio despliegue policial, el lábaro fue retirado este miércoles sobre las 18.17 horas, después de más de 10 horas de trabajo ininterrumpido, siendo posteriormente trasladado a su nuevo emplazamiento de la parroquia Santo Tomás de Villanueva.
Como ocurrió en agosto, en el primer intento (la concesionaria de entonces, Solaris Purgaret, terminó renunciando), hubo protestas, concertaciones y cánticos a favor y en contra de la actuación. Los momentos de tensión, con intercambio de insultos entre grupos de defensores del símbolo y contrarios a él, se vivieron especialmente por la mañana. La tirantez incluso derivó en amenazas a los cargos institucionales y orgánicos de Compromís cuando hicieron acto de presencia.
La operación para retirar la cruz resultó especialmente compleja por el estado de conservación. No en vano, tiene más 79 años de antigüedad. Desde las ocho de la mañana, la empresa adjudicataria de la obra civil, Vainsa Infraestructuras, ejecutó los trabajos previos para entablillar y sujetar la pieza. A continuación, realizó el corte del fuste por la base, que se alargó más de lo esperado por el grosor del hormigón. La cadena de la sierra se destensó en varias ocasiones, sobre todo al tocar el armazón de hierro interior, por lo que se recolocó a fin de seguir con la cisura.
La mercantil precisó dos camiones (uno de ellos de 12 metros), una grúa de gran tonelaje y alrededor de 15 operarios. La principal preocupación se centró en no dañar la pieza, ya que presenta evidencias de deterioro por falta de mantenimiento y el paso del tiempo. Una vez extraída de la plataforma y colocada sobre el camión (a las 19.15 horas, aproximadamente), el lábaro se llevó al nuevo emplazamiento de la parroquia de Santo Tomás de Villanueva.
Los trabajos se prolongaron hasta bien entrada la noche. Para facilitar un encaje perfecto en el soporte construido ex profeso, se seccionó un metro el encofrado desde la base. Luego, se procedió al relleno con hormigón de secado rápido, colocándose refuerzos laterales, que permanecerán varios días.
El monumento, cuyo conjunto arquitectónico es obra de Maristany, se alzó en 1944 en honor a los Caídos por Dios y por España. Su instalación en el parque se produjo después de la Guerra Civil. En 1979, el Ayuntamiento de Castelló resignificó el lábaro para dedicarlo a las víctimas de la violencia.
No obstante, el comité de expertos de la Conselleria advierte en varios informes que la cruz sigue siendo un punto de encuentro y exaltación del franquismo. De ahí que en 2017 el equipo de gobierno, denominado en aquel momento Pacte del Grau, iniciara los trámites administrativos para extraer el monumento del Ribalta. Sin embargo, un primer recurso Contencioso-administrativo de Abogados Cristianos paralizó el expediente, que no se volvió a reactivar hasta esta legislatura, ya con el Acord de Fadrell.