CASTELLÓ. El nuevo 'Libro Rojo de especies amenazadas' del Ministerio de Transición Ecológica que se ha aprobado esta misma semana ha elevado el nivel de ameneza del chorlitejo patinegro, un ave a la que se ha declarado como en peligro de extinción, aumentando su protección y que se ubica en las playas del Mediterráneo, en concreto en las de Castelló.
Justamente este grado superior (el máximo que contempla en Ministerio) va a complicar la instalación de los chiringuitos el próximo verano, tal y como han confirmado fuentes del equipo de gobierno de la capital.
Una complicación que deberá analizar el Ayuntamiento junto a la dirección general de Costas de la Generalitat y con el Ministerio puesto que afectaría a las tres playas: Gurugú, Serradal y El Pinar.
De hecho, los límites impuestos por la protección de este ave ya provocó retrasos en la instalación de los chiringuitos este 2021 y, tras aumentarse la protección, será todo más complejo. De hecho, parece ser que la solución más viable será ubicar las plataformas de los chiringuitos sobre el paseo marítimo, fuera de la arena.
Este ave necesita de la arena de la playa y de las dunas naturales que se crean en el litoral de la capital para la cría y la propagación de la especie y desde los años 90 está amenazado. Además de los efectos del ser humano y los paseos con perros cerca de las dunas, por ejemplo, hay dos elementos que han hecho estragos entre la especie: por un lado las plantas que no son autóctonas y que están dañando mucho las dunas y, en segundo lugar, los temporales.
Tal y como explicaba el edil de Transición Ecológica de Castelló, Fernando Navarro, durante la presentación del balance anual de acciones a favor de esta especie, "temporales como por ejemplo Gloria en 2020 causaron graves daños a las playas" lo que ha repercutido en tener un récord histórico a la baja de parejas de chorlitejos con solo 6, cuando lo habitual en los últimos años estaba siendo entre 11 y 13 parejas.
Ya este año 2021 se ha conseguido normalizar la población y las parejas nidificantes de chorlitejo patinegro han aumentado entre un 25 y un 51% con respecto a 2020.