CASTELLÓ. El equipo de gobierno de la Diputación de Castellón valorará una posible bajada del tramo provincial del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) a las empresas azulejeras. Al menos este es el compromiso adquirido este miércoles por el presidente, José Martí, durante la reunión que ha mantenido con representantes de las tres organizaciones que forman el clúster cerámico castellonense. En el encuentro ha estado presente el responsable jurídico de Ascer, Óscar Gaspar; el secretario general de Anffecc, Manuel Breva; el secretario general de Asebec, Juan José Martínez; y el diputado de Hacienda, Santiago Agustí.
Esta propuesta de rebaja del tipo impositivo, según informan fuentes de la institución provincial a través de un comunicado, es una exigencia de la industria azulejera debido a los sobrecostes que tienen que afrontar por la escalada continua de los precios de la luz y el gas y el encarecimiento de los costes de transporte marítimo. Desde la Diputación, José Martí ha recogido el guante de las patronales y ha asegurado que «se estudiará su inclusión en los presupuestos de 2022».
Para el presidente se trata «de un gesto de confianza» ante el sector «que está tirando del carro de la recuperación económica en Castellón». Si se habla de cifras, a día de hoy solo la cerámica ocupa a más de 15 mil personas de forma directa y 80 mil indirectamente y representa el 40 por ciento del PIB provincial.
El responsable de Hacienda ha explicado que se analizarán todos los números para que esta deducción, que supondrá una merma de los ingresos de la Diputación, no sea incompatible con la puesta en marcha de los proyectos que quedan pendientes de aquí a final de la legislatura.