CASTELLÓ. El presidente José Martí ha llevado al V Congreso de Esmontañas el proyecto de la Diputación de Castellón para favorecer la transición digital de la provincia, que considera "fundamental para acometer en las mejores condiciones posibles la lucha contra la despoblación en la que estamos inmersos". En la presente edición, que se celebra en la localidad oscense de Aínsa bajo el título Territorios de montaña: el reto de la cohesión, ha expuesto la intención de la institución de crear territorios inteligentes mediante la utilización de la tecnología smart para realizar una gestión más eficaz y a menSmartVillagesor coste de los servicios públicos. Con este objetivo se ha diseñado el proyecto SmartVillages de la Diputación, que requiere la existencia de cobertura de internet de calidad en los 135 municipios.
Martí ha participado en la mesa redonda titulada Impulso a los territorios desde la administración local, en la que ha explicado que SmartVillage se ha iniciado con el cambio de las luminarias en 24 pequeños municipios de la provincia, que han sido sustituidas por otras más eficientes y convenientemente sensorizadas, conectadas a un ordenador central del ayuntamiento desde el que se puede hacer una gestión de la intensidad lumínica según las necesidades de cada momento. Este sistema permite encender una farola cuando los sensores detectan el paso una persona caminando y volverla a apagar una vez que ha pasado.
La Diputación también apuesta por la sensorización del sistema de abastecimiento de agua, que se ha iniciado en cuatro municipios, en los que se han colocado sensores en las conducciones de agua desde la salida de los depósitos de abastecimiento hasta los hogares. De esta forma se podrá atajar de forma rápida cualquier fuga de agua que pueda producirse. Para poder adaptarse a esta nueva manera de trabajar es necesario emprender un proceso de formación del personal de los ayuntamientos, que también asumirá la Diputación.
El proceso de sensorización tiene un coste muy elevado que de momento asume únicamente la Diputación, por lo que se irá implementando de forma paulatina con la idea de poder aplicarlo a todos los servicios públicos. En este sentido, explica Martí que "todo sería más rápido y sencillo si se pudieran derivar fondos europeos a un proyecto de este tipo".
Lógicamente, la puesta en marcha del plan de transición digital de la provincia requiere la existencia de cobertura de internet de calidad en todo el territorio, razón por la que la Diputación ha contratado la realización de un mapa de cobertura para hacerlo llegar al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a fin de que no haya disfunciones entre los datos que maneja la administración y la realidad existente en los 135 municipios de la provincia.
El V Congreso Esmontañas ha sido el escenario en el que José Martí ha anunciado que la Diputación de Castellón aprobará en el pleno que se celebrará el próximo martes la adhesión a Esmontañas, una asociación compuesta por ayuntamientos y diputaciones que nace como entidad de representación y acción de los territorios de montaña que tienen problemas de despoblación, desarraigo, falta de oportunidades y aislamiento. Su objetivo es la aportación de soluciones que ayuden a desarrollar la economía y los servicios en las zonas de montaña. En la actualidad, forman parte de este colectivo 28 provincias, 274 municipios y 5 diputaciones.
El diputado de Desarrollo Rural, Santi Pérez, que también está presente en Aínsa, ha destacado que "los territorios de montaña tienen un enorme potencial que, entre todos, hemos de ser capaces de poner en valor, para crear oportunidades de desarrollar proyectos de vida en el ámbito rural y fijar población al territorio". Martí y Pérez han coincidido el congreso de Esmontañas con Francisco Boya, el secretario general para el Reto Demográfico del Gobierno de España, con el que han abordado la problemática existente en la provincia de Castellón en materia de despoblación.
