CASTELLÓ. (EP). La Generalitat Valenciana asumirá a partir del 1 de abril de 2020 el centro de recepción de menores que hasta la fecha gestionaba la Diputación de Castellón en el complejo socieducativo Penyeta Roja. El objetivo, como ha destacado la vicepresidenta de la institución provincial y responsable del área de Bienestar Social, Patricia Puerta, es "dejar de asumir una competencia impropia que tenía la Diputación y que el servicio cuente con todos los preceptos legales y de seguridad jurídica en beneficio de los menores".
Se trata de un paso "fundamental" dentro de la estrategia de la actual corporación provincial, que desde la incorporación del actual equipo de gobierno el pasado mes de junio ha centrado su mirada en el área social y en su "necesaria regularización". "La Diputación no tiene competencia en esta materia y era algo que urgía resolver", ha señalado Patricia Puerta, quien ha puesto en valor "el esfuerzo que se ha realizado para dar la mejor salida a esta situación anómala".
La vicepresidenta, asimismo, ha destacado el trabajo "codo codo" con la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas para buscar la solución más adecuada, tanto para ambas administraciones como para los menores, "pendientes en todo caso del oficio que debe remitir la administración autonómica para seguir avanzando".
La información de todo el proceso iniciado estos meses ha sido constante, con reuniones con las organizaciones sindicales y el área social, así como la de recursos humanos, para poder concretar los pasos a dar, según ha informado la Diputación en un comunicado. Así, la Conselleria está ultimando todo el trabajo en el centro de recepción Verge de Lledó en la capital de la Plana, instalaciones en las que reubicará a los jóvenes. "De lo que se trata es que para los menores el cambio sea lo menos traumático posible", ha dicho Patricia Puerta.
De forma paralela, la Diputación trabaja en la recolocación de toda la plantilla de funcionarios que trabaja en el centro de recepción de menores de Penyeta Roja, que se quedará en la institución provincial, "tal y como era su deseo", ha explicado la vicepresidenta.
En este sentido, en los próximos días se realizarán diversas reuniones con las jefas de cada servicio del complejo para "poner encima de la mesa todo el mapa de la situación". Así, todo el personal funcionario, unas 30 personas, "será reubicado en la medida de las posibilidades en otras áreas de Penyeta Roja y, también, en otros puestos de trabajo que contemplen sus mismas categorías". Para ello, se está realizando un completo estudio para ver la mejor de las soluciones, que incluyen formación para el personal en el caso de que así lo necesiten.
El pasado jueves la vicepresidenta de la Diputación se reunió con todos los trabajadores y trabajadoras del centro en Penyeta para "explicarles de primera mano la situación", en la que se informó además que, por cuestiones legales, es inviable seguir contando con los interinos que trabajaban en el centro.
