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La lluvia aprieta pero no ahoga a la Magdalena: los hoteles, bares y restaurantes entre el 75 y el 80%

23/03/2022 - 

CASTELLÓ. El mal tiempo que está caracterizando a esta Magdalena desde su inicio, y que presumiblemente acompañará a la semana grande castellonera en buena parte de lo que le queda, está provocando muchas dificultades para disfrutar de las fiestas, pero no está teniendo una afección desmesurada en la economía que se deriva de ellas. 

Al menos así lo asegura el presidente de la patronal autonómica CEV en Castellón. Luis Martí apunta que, "tanto la hotelería como la hostelería no han notado mucho la lluvia" y, pese a que evidentemente se han producido cancelaciones de reservas en ambos subsectores, estas no son lo predominante: "La gente tiene unas ganas de salir locas; en circunstancias normales, un tiempo como el de estos días habría hecho que las cancelaciones fueran masivas, y esto no ha ocurrido". 

En esta coyuntura, la ocupación media "para la semana de Magdalena en su conjunto", concreta el presidente de CEV Castellón, es "de entre el 75 y el 80%". Este es un porcentaje muy similar al de València durante las fallas, cuando la ocupación cayó en un 15% respecto a las previsiones iniciales debido a la lluvia, tal y como ha señalado la patronal Hosbec. Además, para argumentar las buenas cifras Martí incide en que, pese a la pésima climatología, la gente sigue saliendo a la calle cuando la lluvia lo permite. De hecho, el lunes, el peor día en cuanto a climatología, eran muchos los restaurantes llenos en Castelló.

Foto: ANTONIO PRADAS

Al 100% de no haber sido por el clima

Eso sí, el representante patronal en la provincia no puede dejar de lamentarse de que, de no haber sido por el temporal, "la ocupación hotelera hubiera sido del 100%". Esta hubiese sido la primera gran alegría para un sector que lo viene pasando muy mal desde que surgió la covid-19 y al que ahora la incertidumbre derivada de la guerra en Ucrania pone de nuevo en un brete. 

En cuanto a la actividad en bares y restaurantes, Martí señala que las asociaciones sectoriales trasladan que el comportamiento es "extraordinario, francamente bueno". Y remarca que esto es algo que ya ha venido apreciando esta rama económica a lo largo de la crisis sanitaria: "Es lo habitual durante la pandemia, en la que ha habido unos dientes de sierra brutales [en referencia a las oscilaciones de actividad]; tras los cierres, cuando ha habido un rayito de sol, el incremento ha sido grandísimo". 

De esta manera, y a falta de lo que resta de Magdalena, hoteleros y hosteleros miran al cielo con el ánimo de que la tregua que este martes ha dado el cielo se repita y puedan cerrar una buena semana festiva. 

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