CASTELLÓ. La Universitat Jaume I ha completado la fase arbórea del Bosque de la Sostenibilidad, coincidiendo con la celebración del Día del Árbol de la Comunitat Valenciana. La plantación del último árbol ha sido por parte de la vicerrectora de Responsabilidad Social, Políticas Inclusivas e igualdad, Elsa González Esteban, y el vicerrector de Infraestructuras y Sostenibilidad, Vicent Cervera Mateu, acompañados del secretario de Amics de Palanques, David Molinos, y el técnico de la Oficina de Cooperación al Desarrollo y Solidaridad, David Joan Marí.
Actualmente, hay alrededor de 180 árboles y arbustos en el Bosque de la Sostenibilidad. A partir de ahora, se acompañará de otros tipos de plantas menores y se abre un periodo de reflexión para estudiar futuras iniciativas que permitan aumentar la masa arbórea global para capturar CO₂ y tratar de disminuir la velocidad del calentamiento global y el cambio climático.
El Bosque de la Sostenibilidad se inició en septiembre de 2017, en el segundo aniversario de la Agenda 2030 y los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, con la plantación de 17 almeces (Celtis australis) con fondos provenientes de la matrícula de la Universitat de Tardor de la Cooperación Universitaria Valenciana, con el objetivo de paliar la huella ecológica de la misma.
Desde entonces, se han sucedido numerosas plantaciones que han combinado los objetivos de captación de CO₂ y mantenimiento de la biodiversidad, tanto local como global. En este sentido, hay que destacar el trabajo conjunto con la asociación ambientalista Amics de Palanques y el establecimiento en el Bosque de tres parques nodriza de hayas, pinos azules y argans.
Las hayas (Fagus sylvatica) son árboles recientemente extintos en el territorio valenciano y, para la creación de este parque nodriza, se ha empleado material procedente del segundo hayedo más meridional del mundo, situada a Beseit.
En cuanto a los pinos azules (Pinus maximartinezii), son un exponente de la biodiversidad planetaria en grave peligro de desaparecer y que produce uno de los piñones comestibles de mayor medida del mundo.
Finalmente, los árboles de argán (Argania spinosa) pueden ser estratégicos para ayudar a diversificar y enriquecer las producciones agrícolas mediterráneas dado que producen uno de los aceites alimentarios y cosméticos más cotizados del mundo.
Además, en el Bosque hay otras especies (tejos, higueras, madroños, carrascas, etc.) que también incrementan el patrimonio natural de la UJI y de Castelló.
Hay que destacar que, en esta línea de acciones, también está prevista una repoblación forestal en Azuébar que tendrá lugar el próximo 11 de febrero mediante el programa UJI Voluntaria de la Oficina de Cooperación al Desarrollo y Solidaridad