CASTELLÓ. El alcalde de l’Alcora, Samuel Falomir, promueve la campaña de comunicación y sensibilización ‘Com abans. Trau el poal al brancal’. Se trata de una iniciativa destinada a informar a la ciudadanía sobre el nuevo sistema de recogida de residuos que va a ponerse en marcha en la localidad.
Un sistema que, como ha explicado Falomir, se va a implantar de manera progresiva, comenzando el 6 de mayo en el barrio de San Jaime, también conocido como del campo de fútbol. Se ha escogido por ser una zona representativa del municipio: diversidad de viviendas, edad de la ciudadanía, comercios e IES. “Hacerlo de esta manera, progresivamente, nos permitirá conocer las necesidades y las cosas a mejorar para adaptar el proyecto al resto de la ciudadanía en un futuro”, ha indicado el primer edil.
El modelo elegido, conocido como ‘puerta a puerta’, consistirá en que los vecinos sacarán al ‘brancal’/puerta de casa 2 fracciones de residuos, de manera separada: orgánica (restos de comida) y resto (aquellos que no son ni orgánicos, ni envases de cartón, plástico y vidrio, ni voluminosos y peligrosos).
Los envases de papel y cartón y vidrio continuarán depositándose en los contenedores situados en la calle y para la recogida de residuos voluminosos, el alcalde ha recordado que el Ayuntamiento ofrece un servicio gratuito los martes y viernes. Además, el municipio cuenta con un ecoparque, que está abierto de martes a domingo.
“Se ha elegido este modelo por ser uno de los sistemas de recogida de residuos domésticos que se han demostrado más eficientes hasta el momento a la hora de mejorar la separación y, por tanto, reducir la cantidad de residuos que van al vertedero”.
Entre otras ventajas, permitirá “mejorar la separación de residuos domésticos facilitando su eliminación o reciclaje, reducir las cifras de generación de residuos para aproximarnos a los objetivos europeos, conocer hábitos y necesidades de la ciudadanía, posibilitando el pago por generación, y nos corresponsabilizará con la complejidad de la gestión de los residuos”.
El alcalde ha insistido en la necesidad de cumplir la normativa europea, estatal y autonómica sobre la gestión de residuos: “para 2025 se requiere un reciclaje del 55% en peso de todos los residuos recogidos, para 2023, el 60%, y en 2035 se espera llegar al 65%”.
Al respecto, ha apuntado que, en la actualidad, “en l’Alcora solo se separan el 8’7% de residuos municipales, muy por debajo de la media nacional del 22,2% y lejos de los objetivos establecidos por la legislación vigente”.
“Todo esto nos ha llevado a actuar y buscar un nuevo modelo de gestión de residuos para favorecer el reciclaje, por un lado, y también para conseguir que la tasa que tendrán que pagar los vecinos y vecinas sea lo más baja posible”. Y es que, cabe recordar que, a partir de 2025, la ley obligará a todos los ayuntamientos a cobrar a la ciudadanía una tasa por la recogida y gestión de basura. Una tasa que el Ayuntamiento de l’Alcora nunca ha cobrado. Según la normativa, se trata de aplicar el principio de “quien contamina paga”, de forma que la tasa tendrá que ser pagada por el productor de los residuos.
Así, “lo que perseguimos es la sostenibilidad ambiental y también la económica a través de la gestión de los residuos. Nuestra responsabilidad es ofrecer a la ciudadanía las herramientas para poder conseguir los objetivos marcados por la legislación y para reducir el impacto ambiental y económico de la gestión de residuos”.
Uno de los caminos para conseguir estos objetivos -ha insistido el alcalde- es “aprovechar las maneras antiguas de hacer: reutilizar, reaprovechar, reducir, ahorrar el consumo y separar antes de echar aquello que ya no nos sirve. De ahí el título de la campaña”.
“Los cambios siempre cuestan al principio y la información es fundamental. Por eso, desde el área de Medio Ambiente hemos preparado esta campaña de comunicación y sensibilización que incluye diferentes acciones: charlas informativas, reparto de material para la separación domiciliaria, educación ambiental a pie de calle, servicio de atención ciudadana para resolver dudas, etc.”.
Para concluir, Falomir ha destacado que “este es un reto de todos y todas, un problema global que necesita acciones locales. Así, además de impulsar el sistema de recogida que consideramos más eficaz y que más favorece el reciclaje, también tendremos que poner de nuestra parte a nivel individual y cambiar algunos hábitos diarios. Cuanto más reciclamos, menos pagaremos. Así, será bueno para el medio ambiente y para nuestra economía”.
