Foto PEPE OLIVARESDesde HOSBEC aseguran que aún no les han convocado y los partidos del Botànic esperan que acudan para aportar y mejorar una tasa que dan por hecha pero cuya aplicación depende de la pandemia
VALÈNCIA. En el calendario de encuentros entre los tres partidos del Botànic y los agentes del sector para recibir sus aportaciones a la tasa turística hay una reunión que está marcada en rojo pero que ahora mismo no tiene fecha. Es el encuentro con la Confederación Empresarial Valenciana y, más concretamente, con la patronal HOSBEC, que no descarta dar plantón y no acudir a la cita.
Desde los partidos que dan apoyo al Consell (especialmente desde Compromís y Unides Podem EU), subrayan que es incuestionable el acuerdo de una tasa que aplicarían aquellos municipios que lo decidieran y que dejaría fuera al Imserso, a los menores o los viajes de salud y de larga estancia. Ahora, dicen, se trata de darle forma hablando con los implicados y los expertos. La otra batalla será cuándo se podría empezar a aplicar, dado que el PSPV siempre defendió que sería una vez superados los efecto de la pandemia del covid-19... y que hay elecciones en 2023.
Pese a que tanto el president Ximo Puig como la vicepresidenta Mónica Oltra insisten en despejar el tema hacia Les Corts (pues allí se llegó al acuerdo para presentar la propuesta en marzo), la opinión de ambos es la más buscada y este viernes la expresaron no sin importantes matices. Aún así, la lider de Compromís deslizó un acuerdo entre ambos sin desvelar los términos.
"Tiene cierta lógica que si han llegado a ese acuerdo lo vayan desarrollando siempre desde el diálogo con todos los actores que participan en esta cuestión", señaló este viernes Puig, que quiso ser "respuestuoso con la separación de poderes". En la misma línea habló Oltra que subrayó, eso sí, que el acuerdo es de los "tres" partidos. Es decir, que el PSPV está dentro.
"Desde luego para mí no es prioritaria en absoluto", afirmó Puig a continuación. Que no lo es su aplicación en estos momentos está claro, falta por aclarar si no lo es tampoco su diseño. Muchas ganas no parece que tenga, en cualquier caso.
"Yo no apostillo al president, creo que decimos cosas muy parecidas", apuntó Oltra. "No he interpretado exactamente que el presidente no esté de acuerdo. De hecho, he hablado de esta cuestión con el president y creo que hay un punto en común que es el que al final saldrá pero, como digo, eso está residenciado en Les Corts", señaló la vicepresidenta, que incidió en que no tiene sentido "que los valencianos la paguen cuando salen por ahí y los turistas no cuando vienen". Su postura es clara.
Respecto a la cita con los empresaros, los partidos del Botànic aseguran que se pactó un encuentro (inicialmente para este lunes) y que después estos pidieron retrasarlo. Vistos sus movimientos, creen que quisieron ganar tiempo pasar sacar la web contra la tasa y tratar de llegar con más fuerza a ese encuentro. De momento, llevan más de mil quinientas adhesiones.
Desde HOSBEC aseguran que no se les ha convocado a ninguna reunión y afirman no tener una decisión tomada sobre su asistencia si esa petición de cita llega. Lo decidirán en el momento. Si finalmente fueran, afirman, sería sólo para reiterar su oposición al tributo pero no para negociarlo. La patronal habla de "imposición", y los partidos de las funciones del "poder legislativo". Están en su derecho de estar en contra y expresarlo pero hasta ahí, dicen.
De hecho, la patronal afirma que su postura y la de Compromís y Unides Podem EU es irreconciliable y acusan al PSPV de haber cambiado de opinión. "No es el momemto de hablar de la tasa sino de la recuperación", insisten desde HOSBEC, que se negarían también a pactarla y a dejarla en suspenso. "Si dentro de dos años es el momento, lo hablaremos dentro de dos años", apuntan.
En este fuego cruzado, el secretario autonómico de Turismo, el socialista Francesc Colomer, tomó partido desde el inicio por la patronal y ha defendido que se trata de un error que tiene un alto coste reputacional a nivel de imagen. 
Para Oltra su posición se debe "a la empatía y a la sensibilidad" que tiene y que le hace identificarse con esas reivindicaciones. "En cualquier caso, yo no soy su intérprete. Ha dado su opinión y luego está el trabajo de los grupos parlamentarios y el Consell es muy respetuoso", señaló.
