Las empresas, preocupadas por el precio en el concurso de residencias 

VALÈNCIA. Las empresas gestoras de residencias han manifestado preocupación por la licitación de 7.100 plazas realizada por la Conselleria de Igualdad la pasada semana para dar cobertura a las necesidades sociales de la autonomía en los próximos cuatro años. Con un presupuesto base de 542,8 millones, desde la patronal Aerte dudan de si será suficiente para poder cubrir todos los requerimientos especificados en los pliegos y que se incrementan con el paso de las anualidades. Según señala el presidente, José María Toro, es aventurado firmar por cinco años a un precio con poca posibilidad de revisión dadas las subidas del IPC en los últimos meses.

A pesar de que el importe por plaza se ha incrementado de 57,69 euros a 68,25; desde Aerte llaman la atención acerca de las subidas de combustible, energía y las previsibles subidas de convenio colectivo que se efectuarán en los próximos meses. "Este encarecimiento de la vida hace muy difícil plantearse un escenario, ya que los precios se calcularon hace casi un año", señala Toro. En este sentido, recuerda que el IPC ha subido casi un 10%. "Si la subida es del 18% y ya se ha se ha subido el 10%, nos hemos comido prácticamente todo el incremento sin contar lo que viene".

A partir de ahí, considera que es difícil comprometerse durante tanto tiempo ya que no solo se incrementa el precio, sino también los requisitos solicitados, motivo por el que se paga más. Además, también se apunta a que la fórmula utilizada tiende a la baja para poder sumar puntos. "Mucha gente se está planteando si merece la pena entrar al concurso porque supone un compromiso que no se sabe si se podrá asumir", reconoce. 

El presidente de la patronal también apunta a los 49 aspectos que se marcan entre los tipos de mejora, y señala que habría sido mejor centrarlos en cuestiones de personal. En este sentido, alude por ejemplo a la compra de proximidad, que se trata de un ítem que mejora el impacto en el entorno pero a su entender no mejora la calidad de la atención. También destaca algunas mejoras son ambiguas, como la petición de "pan de horno tradicional". A esto, se suma que desde que salieron los pliegos se han encontrado con nueve días hábiles para presentar la oferta.

No obstante, también alude a algunos puntos positivos del pliego, como la unificación de los contratos existentes. También a que las plazas que no se asignan en un lote se puedan adjudicar en otro lindante. "Esto permite que no se queden plazas sin cubrir en un lote", apunta. De estas 7.100 plazas, 4.191 corresponden a la provincia de Valencia, 2.033 a la de Alicante y 886 a la de Castellón. Además, la licitación se lanza con el cambio de modelo que se está ultimando a través del decreto de tipologías elaborado por el departamento de Mónica Oltra.