Foto: Alberto Ortega/EPVALENCIA (EFE). El mercado laboral terminó 2022, primer año de aplicación de la reforma, con 278.900 ocupados más, 79.900 parados menos y un caída de la tasa de temporalidad de más de 7 puntos hasta el 17,9 %, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA).
Estas son algunas de las claves de la estadística que, junto a los datos de evolución anual, ha reflejado el enfriamiento del empleo en el último trimestre en un contexto económico marcado por la evolución de los precios y la incertidumbre internacional:
La Encuesta de Población Activa (EPA) es un estudio estadístico destinado a capturar datos sobre el mercado de trabajo. Se trata de una investigación continua y de periodicidad trimestral dirigida a las familias, cuya finalidad principal es obtener datos de la fuerza de trabajo y de sus diversas categorías.
Tras un año transcurrido de la Reforma Laboral, deja las siguientes ocho claves en forma de estadística:
El número de ocupados termina el año en 20.463.900, la mayor cifra de cierre de año desde 2007, tras crecer en 278.900 personas, un 1,38 %, en los 12 últimos meses.
La evolución del último trimestre del año deja no obstante 81.900 ocupados menos, el mayor descenso para este trimestre desde 2013 cuando cayó en 94.800 personas.
De todo el empleo creado en el año, 228.200 personas se han ocupado en el sector privado y 50.700 en el público. Mirando solo al último trimestre el único aumento de empleo viene del sector público, con 20.000 ocupados más, mientras que desciende en 101.900 en el privado.
En el último año, el empleo indefinido ha aumentado en 1.591.100 personas, mientras que el temporal ha disminuido en 1.193.800. En tasa, la temporalidad ha caído 7,5 puntos, hasta el 17,9 %.
El número de parados ha subido en el trimestre en 43.800 personas hasta los 3.024.000, en el mayor aumento del desempleo para un cierre de año desde 2012. No obstante, en el último año el paro ha disminuido en 79.900 personas, lo que deja la tasa en el 12,87 %, manteniéndose por debajo del 13 %.
El desempleo entre los menores de 25 años creció durante 2022 en 15.900 personas, de forma que el total de parados de entre 16 y 24 años se situó en 464.100 personas. Se trata de la menor cifra desde el cierre de 2019 y deja la tasa de paro juvenil en el 29,26 %, casi un punto y medio menos que a cierre de 2021, por el aumento de la población activa.
El año ha sido negativo para los trabajadores por cuenta propia, con 34.700 personas menos en variación trimestral y 111.200 en el último año.
Esta evolución de ocupados y parados se enmarca en una población activa que ha descendido también en el último trimestre con 38.100 menos, hasta los 23.487.800, pero que en todo 2022 se salda con un aumento de la población activa de 199.000 personas.
