CASTELLÓ. La Universitat Jaume I de Castelló se suma a la conmemoración el próximo 18 de noviembre de la creación de la Red Valenciana de Universidades Públicas Saludables. Este año, a través del lema Que el humo no te ate, las cinco universidades públicas valencianas se unen para recordar el impacto que el consumo de tabaco genera en la salud y también en el entorno.
De este modo, la campaña reflexiona sobre las múltiples repercusiones que los diferentes tipos de tabaco tienen sobre la salud de las personas fumadoras, pero también sobre aquellas que están expuestas al humo. Al mismo tiempo, se visibiliza el impacto que tanto el proceso de generación como de consumo de tabaco producen en el medio ambiente. El uso de productos químicos acompaña al tabaco desde el proceso de plantación hasta el de manufacturación, hecho que se suma a la cantidad de residuos generados en entornos naturales, relacionados con las colillas de tabaco que las personas echan en bosques, playas o entornos urbanizados.
Por este motivo, a lo largo de la semana se realizarán diferentes actividades. Hoy martes 16 de noviembre se ha realizado en la Facultad de Ciencias de la Salud el taller Herramientas para gestionar el estrés y la regulación emocional, mediante el que se han facilitado algunas pautas alternativas para evitar que el malestar emocional se asocie al consumo de tabaco.
El día 17 de noviembre, se emitirá un programa monotemático de A propòsit de la salut, emitido por la radio universitaria, con la participación de Cristina de Maya, técnica de prevención de la Asociación Española contra el Cáncer de Castelló.
Así mismo, el jueves 18, entre las 17 y las 19 horas, se realizará en el aula HD0131AA el taller Salud y drogas desde la reducción y prevención de riesgos, en el que se abordarán pautas para mejorar las estrategias de prevención del consumo de sustancias como el tabaco. Además, a lo largo de la semana se difundirán mensajes de sensibilización por redes.
La Red Valenciana de Universidades Públicas Saludables, y la UJI como parte de ella, visibiliza de este modo cómo la función primordial de la universidad en docencia, investigación, innovación y proyección sociocultural representa un marco idóneo para contribuir notablemente al bienestar y a la salud.