CASTELLÓ (EP). La Asociación Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos (Ascer) ha calificado de "prematura" y "completamente desproporcionada" la huelga indefinida que han convocado UGT y CCOO en el sector cerámico a partir del 14 de julio tras no acercar posturas con la patronal en las negociaciones del convenio colectivo.
Ascer ha mostrado su "rechazo absoluto" a la medida de presión anunciada y convocada, "de todo punto prematura y completamente desproporcionada en relación con la situación de la negociación, y en un momento en el que las empresas están intentando recuperarse del grave impacto que ha tenido el período más virulento de la actual pandemia por Covid-19".
Según ha indicado la patronal del sector en un comunicado, "n ese escenario, la moderación de todos los factores y costes de producción es una exigencia elemental si se quiere garantizar la viabilidad de las empresas y, con ellas, de su empleo".
"A las dificultades ya constatadas se unen nuevas amenazas, como el permanente incremento de los costes de la energía, gas -12 por ciento en 15 días- y electricidad, el alza de los precios de los derechos de emisión de CO2 en un 77%, o el impacto del futuro Fondo de Sostenibilidad del Sistema Eléctrico, entre otros", ha añadido.
Ascer considera que "sin paz social no es posible una relación laboral estable dentro de las empresas, por lo que, sin esa relación, las posibilidades de competir con éxito disminuyen". Ha destacado que hay que agotar las deliberaciones de la mesa de negociación para tratar de llegar a un acuerdo razonable para todos, "evitando tomar atajos que demasiado a menudo a nada conducen".
Según la patronal, los sindicatos no parecen entenderlo así, "olvidando que en los últimos tres años se han estado incrementando los salarios de convenio más de cinco puntos por encima del IPC". "Mantener este ritmo de crecimiento de los costes no es sostenible porque las empresas no logran ser competitivas, especialmente en nuestro mercado principal: el exterior", ha apuntado ASCER, que cree que los sindicatos deben entenderlo y avenirse a una solución negociada. "De otro modo el futuro de Castellón se presenta muy complicado", ha advertido.
"A futuro, el convenio de sector, que hoy por hoy nadie cuestiona, debe servir para mantener unos salarios de referencia garantizados iguales para todos, que deberán ser oportunamente actualizados, así como unos derechos laborales y sociales comunes, lo que implica otorgar cesiones por las empresas y contrapartidas por los sindicatos, pues el convenio no puede erigirse en un marco legal de privilegio para algunos", ha subrayado Ascer.
La patronal ha anunciado que defenderá el marco convencional normativo, "pero no a cualquier precio". "Lo primero son las empresas y el empleo", ha concluido.
Fotos: CARLOS PASCUAL