MURCIA. "Los empresarios tenemos que dar el paso para comunicar mejor y más eficientes todo lo que aportamos a la sociedad", asegura José Antonio Moreno, empresario y consultor experto en empresas familiares con más de 20 años de experiencia en la dirección general de compañías. En una entrevista con Plaza, se muestra convencido de que los empresarios tienen que perder el miedo a contar lo que hacen. "Es muy importante que la sociedad lo sepa", sostiene. "Porque no se puede ver al empresario como el tigre que hay derribar ni tampoco como la vaca que hay que ordeñar, sino que se debe ver como una gran oportunidad de trabajo".
España cuenta con 3.430.000 empresas, de las que el 95,7% no tienen asalariados o son microempresas. Además, el 99,9% de las empresas son pymes y solamente el 0,72% son medianas y grandes. "Pensamos que los empresarios son solo los grandes, y no: los autónomos y los comerciantes también lo son. Una tienda que contrata dos trabajadores o un arquitecto que crea un despacho también son empresarios", apunta Moreno. El sector privado, de hecho, aporta el 85% del PIB total del país. Además, representa el 90,8% de la inversión de España y el 95,7% de la inversión en activos e intangibles. A través del Impuesto de Sociedades, las empresas españolas aportan 32.300 millones de euros a las arcas públicas.
-¿Qué imagen tiene la sociedad de los empresarios?
-Es una asignatura que siempre hemos tenido pendiente los empresarios. Hay que tener en cuenta que ya no hay tanta diferencia entre los elementos que constituyen una empresa. Me refiero a las personas. A diferencia de otras épocas, en este escenario económico, en el que hay mucha competitividad, tanto empresarios como trabajadores tenemos que estar totalmente alineados. En una empresa tanto empresarios como trabajadores tenemos que trabajar juntos de la mano. Estamos todos en el mismo barco. El objetivo es la supervivencia de la empresa, que mantiene tanto al empresario como al trabajador.
-¿Qué conclusiones extrae del primer barómetro de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) que radiografía cómo valora la sociedad a los empresarios, cuya encuesta ha sido elaborada por GAD3?
-Los resultados han sido muy interesantes en las facetas del emprendimiento en España, la percepción sobre los empresarios, el potencial emprendedor y la confianza empresarial. Por ejemplo, el 77% de la población tiene una imagen muy positiva o positiva de los empresarios españoles. Además, el 63% de los encuestados se muestra muy satisfecho o satisfecho tras haber emprendido. También hay que destacar que la media general de la contribución percibida del empresario al bienestar social y económico de la sociedad es de 7,5. Otro punto que llama la atención es que el 41% admira a ciertas empresas por su cultura empresarial y sus buenas prácticas. Todos estos datos han de ser nuestro punto de partida para establecer una mejora para el próximo barómetro, en donde podamos comparar las acciones que tenemos por delante para establecer una mejora en nuestra imagen empresarial con la sociedad en general.
-¿Qué valor aportan los empresarios?
-Fundamentalmente aportan la generación de empleo. Los empresarios son los grandes generadores de empleo y de bienestar de nuestro país. Según el estudio del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE), el 84% del empleo español procede del sector privado. Tenemos 17,2 millones de ocupados, según la EPA en el 2022. El sector privado aporta el 85,2% del PIB de España. Las empresas aportan el 69,5% de las cotizaciones sociales a la seguridad social de los empleadores; estos son unos 95.556 millones de euros en 2021.
"Si el empresario no cuenta lo que hace, la sociedad no le va a valorar"
-¿Qué valores tiene que transmitir el empresario?
-Lo primero que tenemos que hacer los empresarios es perder el miedo a contar lo que hacemos. Tenemos que contar qué hacemos y cómo lo desarrollamos. Dejemos atrás las falsas humildades y comuniquemos nuestras experiencias a la sociedad. ¿Cómo? Con la comunicación, que juega un papel transcendental. Hay que ser transparente: contar las acciones, los planes estratégicos y la realidad del negocio. También hay que contar los fracasos. Todo hay que transmitírselo al equipo. Con una comunicación real, los problemas difíciles se sobrellevaban mejor. Lo digo por experiencia en muchas empresas familiares. Genera una retroalimentación motivadora. Si no contamos lo que hacemos, la sociedad no se hace eco de nuestra labor.
-Por su experiencia como consultor, ¿en qué cree que deben mejorar los empresarios?
-En ocasiones, el empresario quiere pasar desapercibido. Considero que una cierta prudencia puede estar bien, pero en el fondo debe salir a la palestra. Si no cuenta lo que hace, la sociedad no le va a valorar. Es una manera de mejorar su valoración. No tengamos miedo a decir lo que hacemos. Demos el paso.
-¿Cómo se hace?
-Por ejemplo, si es una empresa familiar, cuente la historia del fundador: cómo nace, cómo creció, cómo superó etapas y cómo pasa de generación en generación. Deben contar el esfuerzo que supone una empresa. Si hacemos copartícipes a los trabajadores, ganamos en transparencia y confianza. La actitud positiva también es importante. Si se une al esfuerzo y se añade a la confianza, es el triángulo perfecto.
-¿Y cómo deben actuar ante entornos tan cambiantes como los actuales?
-Un elemento importante es la adaptabilidad. Tenemos que ser muy adaptables al entorno y a la sociedad. Tenemos que mirar en la distancia corta y también poner las largas. Mirar a medio y largo plazo. El empresario se tiene que formar todos los días. Si queremos transmitir, tenemos que formarnos. Los valores de cada empresario marcan el ADN de cada empresa. Deben ser valores reales, tangibles y palpables. Por ejemplo, si pide puntualidad, debe ser puntual. La mejor manera de transmitir valores es a través del ejemplo. Es el aliado perfecto para un profesional.
"Cuanto mejor comuniquemos, mejor funcionará la empresa"
-¿Qué aspectos cree que hay que transmitir a las nuevas generaciones?
-En mis experiencia de más de 20 años en la formación de directivos, llevo diez años impartiendo clases a chavales de Grados, con edades de 21 años, que se licencian en Ingeniería. Para mí es muy gratificante la actividad formativa con los alumnos. Las escuelas son un foro fantástico para que los empresarios expliquen lo que hacen. Las generaciones que van a entrar al mercado laboral tienen que tener información para luego decidir qué quieren hacer: si ir al sector privado o al público. Y los empresarios tenemos que contar fracasos, errores, experiencias, cómo salieron de situaciones difíciles...
-Y otro aspecto es la responsabilidad.
-Porque los empresarios dirigimos personas. Debemos ser responsables al impulsar nuestra empresa y debemos trabajar con valores que se tienen que transmitir. Hay que comunicarla con proximidad y mesura. Si el equipo es copartícipe del plan de acción, indudablemente nos dará un mejor bienestar dentro de la compañía. Cuanto mejor se comunique, mejor funcionará la empresa.
José Antonio Moreno. Foto: MURCIA PLAZA